El cortometraje Tormenta de Arena, que iba a ser protagonizado por el artista y disidente chino Ai Weiwei, ha tenido que ser paralizado temporalmente por desacuerdos entre el realizador del mismo y el célebre activista, quien alega que no se le informó correctamente de los detalles del proyecto.

En una carta remitida al director del corto, el estadounidense Jason Wishnow, escrita por el propio Ai, éste asegura que nunca accedió a ser el protagonista de la producción cinematográfica, ni a que su imagen o algunas imágenes cedidas por él fueran usadas en la promoción de ésta.

Según la misiva, el artista sólo deseaba tener un papel testimonial en el cortometraje, una historia ambientada en una China del futuro, en la que el agua es un bien escaso, y Ai asume el papel de un contrabandista de ese líquido elemento.

A consecuencia del desacuerdo entre las partes, la información del filme que se ofrecía en la web de "crowdfunding" Kickstarter, desde donde se buscaba obtener financiación que ayude a distribuir el corto, ha sido retirada temporalmente.

En lugar de los textos y vídeos promocionales que hasta ahora podían verse en la web, aparece un mensaje en el que se avisa que el corto es objeto de una disputa por derechos de propiedad intelectual.

Wishnow esperaba estrenar este verano el cortometraje, que fue rodado en enero de 2013.

En el corto ha colaborado también el australiano Christopher Doyle, aclamado en joyas recientes del cine chino como Héroe, de Zhang Yimou, o Deseando amar, de Wang Kar-wai.

Ai Weiwei, famoso diseñador del Estadio Olímpico de Pekín y activo en decenas de causas sociales y de derechos humanos en China, tiene limitados sus movimientos desde que en 2011 fuera condenado a una millonaria multa por fraude fiscal, que según sus seguidores fue una venganza del régimen contra su activismo.

sc