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"Mariana" vuelve a la Roma para recordar "Las batallas en el desierto"

Yanet Aguilar Sosa| El Universal
05:10Lunes 30 de junio de 2014

El escritor José Emilio Pacheco habría cumplido este lunes 75 años. Una de sus obras emblemáticas fue "Las Batallas en el Desierto", que inspiró una canción de Café Tacvba y una película llamada "Mariana, Mariana" Archivo/ELUNIVERSAL

Elizabeth Aguilar protagonizó la película en los años 80 junto a Luis Mario Quiroz. Ella interpretó el papel de Mariana. Tomada de video

Para recordar al autor, se realizó un recorrido por escenarios de la colonia Roma junto a Aguilar, quien nunca tuvo la oportunidad de conocer a Pacheco. Juan Boites

El colegio ubicado en las calles de Zacatecas y Orizaba se usó para mostrar la escuela a donde acudía el protagonista. Juan Boites

En la Plaza Luis Cabrera se mostraba al protagonista jugando o de trayecto a casa. Juan Boites

Jos Emilio Pacheco cuando recibi el Premio Cervantes

EN MADRID, EN 2010. José Emilio Pacheco cuando recibió el Premio Cervantes. (Foto: EFE )

Con un paseo por esa colonia, la actriz que protagonizó la versión cinematográfica de la novela conmemora los 75 años de José Emilio Pacheco que hoy cumpliría

yanet.aguilar@eluniversal.com.mx

Alrededor de Las batallas en el desierto es esencial la música, el cine y la televisión. La novela corta que ha inmortalizado a José Emilio Pacheco está habitada por los acordes musicales del bolero Obsesión en la voz de Julio Jaramillo que dice:

“Por alto está el cielo en el mundo/ por hondo que sea el mar profundo/ no habrá una barrera en el mundo/ que mi amor profundo/ no rompa por ti.” La novela también ha generado la composición Las batallas, que Café Tacuba hizo en 1987 en homenaje al escritor: “Oye Carlos/ por qué tuviste/ que salirte de la escuela esta mañana/ oye Carlos/ por qué tuviste/ que decirle que la amabas, a Mariana”.

Más allá de la música y de la incursión que en México tuvieron en los años 40 los electrodomésticos y las costumbres y alimentos provenientes de los Estados Unidos, está el cine mexicano con la adaptación que en 1985 hizo Vicente Leñero y que fue llevada a la pantalla grande en la cinta Mariana, Mariana, dirigida por Alberto Isaac. Y más allá del cine están los espacios, edificios, calles y avenidas de la colonia Roma, que José Pacheco retrató en su novela.

Allí están las calles de Zacatecas, Orizaba y Tabasco, la avenida Álvaro Obregón, las plazas Luis Cabera y Río de Janeiro; la mítica Romita; esas calles que José Emilio Pacheco caminó y dejó para la historia en Las batallas en el desierto y que hoy, a más de tres décadas de distancia, fueron revisitadas por Elizabeth Aguilar, la actriz que dio vida a “Mariana” en la adaptación cinematográfica de Las batallas en el desierto.

Esa bella mujer que sedujo a decenas de caballeros, no recuerda que José Emilio Pacheco haya aparecido algún día por la filmación de Mariana, Mariana, pero sí recuerda a Vicente Leñero, quien hizo el guión cinematográfico de esa obra que inmortalizó al poeta, narrador, ensayista y traductor mexicano que hoy cumpliría 75 años.

Recuerda también la primera vez que leyó la novela incitada por José Estrada, el director de cine que junto con Vicente Leñero convencieron a Pacheco de llevar su novela a la pantalla grande.

Ella se enamoró literalmente de Mariana y se sintió identificada con esa bella mujer que, sin quererlo, se vuelve el primer amor y más secreto de “Carlitos”, el amigo de su hijo.

La película, como la novela, recrea el México de los años 40 pero visto desde los años 80, cuando Carlos ya es un hombre maduro y regresa a México para el sepelio de su padre; y con el regreso vuelven los recuerdos de su primer amor: Mariana, siempre Mariana.

Para conmemorar el 75 cumpleaños de José Emilio Pacheco, Elizabeth Aguilar, recorrió los espacios, edificios, calles y avenidas de la colonia Roma, desde el Colegio Montes de Oca de la película, que en la época de la filmación era el Colegio México y que hoy en día es la Universidad de la Comunicación, hasta las calles de Zacatecas, Orizaba y la Plaza Luis Cabrera; lugares que detonaron la memoria de Elizabeth Aguilar.

“Fue una gran experiencia. Para mí, Mariana, Mariana es mi película, es mi paso por el cine mexicano, que ahí iba a quedar; aunque sea una sola película, he hecho muchas, pero esa es mi película y queda para la historia”, dice Elizabeth Aguilar teniendo a la espalda las rejas del colegio donde fue rodada la cinta que estuvo nominada a nueve premios Ariel.

Las andanzas por la Roma

“Miré la avenida Álvaro Obregón y me dije: Voy a guardar intacto el recuerdo de este instante porque todo lo que existe ahora mismo nunca volverá a ser igual. Un día lo veré como la más remota prehistoria. Voy a conservarlo entero porque hoy me enamoré de Mariana. ¿Qué va a pasar? No pasará nada”, escribió José Emilio Pacheco en Las batallas en el desierto.

Esa misma avenida de la Roma y el pasaje lo rememora Elizabeth Aguilar, la actriz de la cinta que fue estrenada en 1987. “Creo que quedó una película bien, quedó una película que fue al Festival de Cine en Tashkent, en Rusia, con Mariana, Mariana abríamos la semana de cine mexicano en Pushkin, en Moscú, cuando estaba la gran cumbre Reagan-Gorbachov; que estuviera una muestra del cine mexicano, abrir con Mariana, Mariana, fue muy bueno; la gente se paraba al final a aplaudir”, recuerda la actriz parada ante lo que fuera el Colegio México.

Recordó cómo José Estrada le dio la novela para que la leyera porque quería que fuera Mariana; rememoró las varias batallas que dio Estrada para lograr Mariana, Mariana, y cómo no lo pudo siquiera empezar pues dos días antes de comenzará el rodaje murió de un infarto. Aguilar recordó cómo fueron juntos vistiendo al personaje.

“Nos íbamos a tomar café, a platicar sobre el personaje, a irlo vistiendo, a ir platicando sobre las experiencias mías, porque yo le dije sabes qué, que donde vivo tengo una vecina que su hijo tiene era como la edad del de este niño y cada que me subo al elevador y que me lo encuentro se me queda viendo y se queda como extasiado; después me dice mi vecina: ‘sabes qué, es que mi hijo está enamorada de ti’. Era como parte de lo del libro”, afirma la actriz.

Luego camina por Zacatecas y cruza Orizaba, sube los escalones que la llevan a la Plaza Luis Cabrera que también aparece en la cinta; y allí recuerda todo lo que se ha modificado la colonia Roma, no sólo la de los años 40 que retrató Pacheco en Las batallas en el desierto, sino las de 1985 cuando comenzaron el rodaje. “Está muy diferente, ya está muy cambiado todo y más que pasó algo muy fuerte en la ciudad el terremoto de 1985 sí vino a cambiar la situación anímica de los ciudadanos, sobre todo la Roma, que fue una de las más afectadas”.

También recuerda que aunque en la novela de José Emilio siempre transcurre en la colonia Roma, la cinta fue filmada en la colonia Condesa, en un edificio frente al parque México, en el número 87.

“Allí está el edificio y el poste donde Carlitos escondía la foto que me robo de mi casa”, dice Elizabet Aguilar, la actriz que celebra la cinta la que la inmortalizó pero lamenta no haberle estrechado al menos la mano a José Emilio. “Alguna vez me acerqué a Cristina (Pacheco) y le dije que tenía mucha ilusión de conocerlo, ella me dijo que sí, que iba a ver la oportunidad pero nunca se dio”.



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