Tovar y sus batallas en defensa del patrimonio
GUARDIA. Fernando y Rafael Tovar, Roberto Hernández y Jacobo Zabludovsky velan el cuerpo de Guillermo Tovar. (Foto: ARIEL OJEDA / EL UNIVERSAL )
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Cuando en mayo de 1986, Guillermo Tovar de Teresa fue designado Cronista de la Ciudad de México, tomó como principal tarea luchar en favor del Centro Histórico, destrozado por el terremoto de septiembre de 1985. Una de sus primeras propuestas fue la recuperación del sitio donde se ubicaba el famoso Hotel Regis, a un costado de la Alameda Central, para lo cual solicitó el apoyo del arquitecto Luis Barragán, quien sería el encargado de diseñar el jardín. A la iniciativa se unió el artista Rufino Tamayo, quien prometió donar una escultura que sirviera como monumento en el centro del predio.
Sin embargo, la propuesta del historiador, fallecido la tarde del domingo a los 57 años debido a una hemorragia interna —producto de una caída—, fue rechazada por las autoridades de ese momento, entre otros por Manuel Camacho Solís, entonces secretario de Desarrollo Urbano y Ecología. A cambio se construyó la Plaza de la Solidaridad, un espacio que actualmente luce casi en el abandono.
Esa decisión, según contó el mismo autor de La Ciudad de los Palacios hace un mes en el foro de Facebook creado en defensa de “El Caballito”, lo llevaron a renunciar de su cargo como Crónista único de la ciudad. “Esa fue la causa: que un político de porquería impidiera lo de Tamayo y Barragán en el predio del huerto del antiguo convento de San Diego de México. Entonces propuse la creación de un Consejo de la Crónica y me di la media vuelta en el asunto”.
Pero sus batallas en defensa del patrimonio del Centro Histórico de la ciudad de México no pararon ahí. En todo momento, el investigador, que ayer fue despedido por la comunidad cultural en el Panteón Francés, se pronunció por el rescate del Centro Histórico en todas sus extensiones, entre ellas la parte suroriente: “Las autoridades deben volver la vista al rescate de esa zona tan insigne y tan valiosa... Es el centro desdeñado y oculto, pero no por eso es menos importante”, sostenía.
Otros casos particulares por los que el también investigador del México virreinal luchó son la demolición de cinco casas coloniales en la calle de Regina, en 2007.
“Fue una campaña muy representativa porque fueron como cinco monumentos históricos los destruidos”, recordó el antropólogo Bolfy Cottom, quien añadió que Tovar fue un personaje que dedicó buena parte de su vida a la defensa del Centro Histórico, a la ciudad antigua y colonial.
“Fue determinante siempre a la hora de hacer críticas a las obras de los demás. Era respetuoso cuando interveníamos, aunque no dejaba de señalar errores a quienes trabajábamos en alguna intervención”, recordó por su parte el arquitecto Sergio Zaldívar.
Evitar que la administración del antiguo Palacio del Arzobispado pasara a manos de la Iglesia; impulsar que se autorizaran estudios de mecánica de suelo y recimentación de la Catedral Metropolitana y el Sagrario, que se realizara un inventario de los bienes artísticos de la Catedral y que se rescatara la Ruta de la Amistad y muchos otros casos más figuran entre el largo historial de luchas emprendidas por este historiador que hasta el último momento de su vida se mantuvo como un aguerrido defensor del patrimonio con el caso de la conservación de “El Caballito”.
“Es inapreciable todo lo que hizo y aquí con ‘El Caballito’ encontró una respuesta impresionante, tenía más de 2 mil 500 seguidores, que en un tema cultural es rarísimo. Se convirtió en el paladín en la defensa de ‘El Caballito’ y jaló un montón de gente, y es que en eso desde luego estaba decidido a llevar la batalla hasta que la escultura se restaurara adecuadamente”, comentó el arquitecto Flores Marini, quien también destacó la labor de Tovar como investigador: “Sí tuvo que ver con algunas acciones de la ciudad pero fundamentalmente era un hombre de gabinete”.
Esas investigaciones y publicaciones que logró, añadió Sergio Zaldívar, hacían que “hubiera un examen de conciencia a la comunidad y de las autoriades para rectificar caminos en el desarrollo y proceso urbanístico”.
Homenajes
Esas luchas por la defensa del patrimonio histórico también fueron evocadas por su hermano Rafael Tovar y de Teresa, presidente de Conaculta: “Recuerdo que estaba siempre al tanto del estado de algunos monumentos, especialmente le preocupaban cuando él veía alguna posibilidad de que sufrieran algún daño e inmediatamente se movilizaba”, comentó ayer en el Panteón Francés, donde diversos personajes de la comunidad cultural, funcionarios y empresarios acudieron a dar el último adiós al cronista que fue sepultado en la cripta familiar, donde yacen los restos de su padre y su abuelo.
Rafael Tovar aseguró que uno de los proyectos en los que trabajaba su hermano era una versión digital de su obra La ciudad de los Palacios, la cual podría ser reeditada.
Durante su estancia en el funeral, el secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet Chemor, adelantó que la próxima semana se realizará un homenaje al historiador en el Museo Nacional de Antropología, así como una edición especial que elaborará la institución a su cargo.
Al panteón también acudieron personajes como el empresario Carlos Slim, el periodista Jacobo Zabludovsky; María Teresa Franco, directora del INAH, María Cristina Cepeda, directora del INBA, entre muchos otros.
El arquitecto Jaime Ortiz Lajous, resumió el mejor homenaje para Tovar: continuar con la denfensa del patrimonio: “Queremos comenzar, a iniciativa de él, una red nacional con organizaciones locales para que unidos podamos fortalecer los centros históricos del país”. (Con información de Yanet Aguilar)