Exposición rinde homenaje al Dr. Atl revolucionario
MOMENTO. Francisco Villa fue captado limpiándose las lágrimas frente a la tumba de Francisco I. Madero. (Foto: PATRICIA JUÁREZ / EL UNIVERSAL )
abida.ventura@eluniversal.com.mx
Una imagen que muestra a Gerardo Murillo, Dr. Atl rescostado en una banca de un parque, otra de Francisco Villa limpiándose las lágrimas con un pañuelo frente a la tumba de Francisco I. Madero, unas de Porfirio Díaz paseando por Peralvillo y en la inauguración del Puerto de Veracruz, así como imágenes de documentos que muestran la relación entre Madero y Victoriano Huerta después del golpe de Estado en 1913 salen a la luz en la exposición Revolución Atl, que hoy abre al público en el jardín de la Plaza Grand San Ángel.
Organizada por Casasola México, galería que se dedica a la comercialización de productos con fotografías del archivo Gustavo Casasola, la muestra se presenta como un homenaje especial a la participación del Dr. Atl en la Revolución Mexicana. Específicamente cuando Venustiano Carranza le pide intervenir con Emiliano Zapata para que éste se adhiera al Plan de Guadalupe.
Son 34 fotografías, más de una decena inéditas, provenientes del archivo Gustavo Casasola, hijo de Agustín Víctor Casasola, fundador de la primera agencia de información gráfica del país.
Este archivo, explica Vania Casasola, nieta de Gustavo, es como el “hermano menor” del que el INAH resguarda en la Fototeca Nacional de Pachuca, la cual comprende imágenes del archivo de Agustín Víctor Casasola, fundador de la agencia. El de Gustavo, añade, comprende material de 1896 a 1970 e incluye la colección que su abuelo comenzó a reunir para sus ediciones de Historia gráfica de la Revolución Mexicana, que comenzó a publicar desde 1940.
“Es como un hermano menor del otro, contiene documentos de la familia, fotografías de las colecciones privadas de la familia, documentos de la Agencia de Información Gráfica, libros contables, contratos, así como fotografías de prensa, de diversas épocas y de todos los sectores”, comenta Vania en entrevista.
La también creadora de la galería Casasola México comenta que tanto la tienda, que abrió en 2010, como la exposición nacen con la idea de dar a conocer el acervo de su abuelo, ya que hasta ahora sólo se conoce 45%. “Tenemos 65% digitalizado y hay todavía mucho material que estamos encontrando todos los días”, dice.
Por eso, añade, la muestra presenta documentos poco conocidos sobre aspectos más cotidianos e íntimos de diversos personajes de la Revolución mexicana: “Son documentos que acercan un poco más a la vivencia real de la época, como una carta de 1909 que Aquiles Serdán dirige a Díaz y le narra el intento de asesinato que sufrió en su casa; también una carta que Madero le escribe a Huerta reclamándole falta de consideración y respeto que tuvo hacia su persona y sus mandatos”.
“Queremos platicar la parte de cómo un personaje histórico era tan humano, egoísta e incrédulo, con errores, como una persona normal”, dice.
Bajo esa misma idea, todos los sábados, hasta el 14 de diciembre, tres actores de la Compañía Nacional de Teatro Clásico Fénix Novohispano, que caracterizarán a una adelita, Carmen Romero Rubio y Emiliano Zapata presentarán un espectáculo que conducirá al público por la exposición.
El espectáculo se llevará a cabo en el jardín de la Plaza, los sábados 16 y 23 de noviembre a las 16 horas, y el 30 de noviembre, el 7 y 14 de diciembre, a las 13 horas.
Revolución Atl, que permanecerá hasta el 14 de diciembre, también es una forma de impulsar la galería Casasola México, que comenzó a funcionar en 2010, en el marco del centenario de la Revolución, y busca revalorizar el archivo de Gustavo Casasola a partir del diseño. La tienda, en donde es posible encontrar desde fotografías a gran tamaño, bolsas, carteras, cojines y diversos productos que reproducen alguna fotografía histórica, también es una forma de obtener recursos para conservar el archivo de Gustavo, explica Vania: “En la Fototeca, el INAH realiza una labor de investigación y resguardo del archivo gráfico Casasola, nosotros también estamos en el proceso de conservarlo pero no tenemos los mismos fondos que ellos, por eso creamos también la línea Casasola México, para tener recursos”.
Otro de los proyectos, añade, es buscar apoyo de instituciones que colaboren en la conservación del archivo. Actualmente están en proceso de diálogo con la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM) del INAH para digitalizar y conservar el acervo.