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La compañía Laleget Danza presentará mañana en el Palacio de Bellas una reinterpretación y escenografía contemporánea del ballet Petrushka, con música de Igor Stravinsky.

Con esta obra que cuenta la historia de un triángulo amoroso entre una marioneta, un mago y una bailarina, la compañía fundada en 2005 ofrece por primera vez un espectáculo para el público infantil. “Mi interés era crear una pieza para niños y consideré que Petrushka podía ser extraordinaria para ello, porque además es una obra que me atrae como ballet y me gusta mucho la música”, dice en entrevista el coreógrafo Diego Vázquez.

Laleget Danza se ha caracterizado por tener en sus filas a artistas de Japón, Portugal y Estados Unidos, por eso ha destacado por sus propuestas eclécticas y ahora, dice Vázquez, apuestan por una estética que resulte “atractiva” para los niños. “Lo que quería era ofrecerles una pieza que tuviera elementos que pueden reconocer, como el anime, pero traducidos al lenguaje de la danza contemporánea. Es una obra que además cuenta con una escenografía hecha por el gran arquitecto Oliver Layseca”, sostiene.

Laleget significa, en hebreo, “ir”, verbo que sus integrantes interpretan como el camino a seguir para llegar directamente al espectador, por eso, agrega, a nivel de estructura coreográfica usó elementos del ballet clásico, lenguajes de la danza contemporáneo y folclor mexicano para ofrecer a la audiencia un espectáculo que resulte atractivo.

“Además utilicé herramientas de circo y de teatro, porque quería que hubiera diversidad, esta Petrushka no es ballet, hay mucho colorido. La intención ha sido tener al público infantil atentos a lo que ocurre en escena y creo que lo hemos logrado porque desde su estreno en 2011 a la fecha hemos ofrecido cerca de 35 funciones, un número que podría ser considerado un gran logro dentro de la danza contemporánea”, explica.

Entre las obras que Laleget Danza ha escenificado destacan Esch, Salmo 30, Doble encuentro, Invitación, Ester y Tierra ajena. Ahora, en Petrushka la escenografía juega un papel fundamental. “Es una gran producción porque la escenografía es enorme con un peso de seis toneladas, pero eso no ha impedido que ya hayamos ofrecido funciones en distintas partes de la República. En el Palacio de Bellas Artes será una gran oportunidad mostrarla porque está hecha para un teatro así”.

Vázquez, quien fue becado por el gobierno de Holanda en 2001 para estudiar en la Rotterdam Dance Academy y en México ha bailado las obras de Dianne Carter, Raúl Parrao, Marco Antonio Silva, Tania Pérez-Salas y Alberto de León, entre otros, apunta que Petrushka es una obra que brinda oportunidades creativas a la compañía. “Cada vez que la remontamos le añadimos nuevos elementos que se podrán disfrutar en Bellas Artes”, dice.

La obra, refiere, integra también “personajes que hacen referencia a la actualidad, es decir, si en el cuadro original había cocheros, en nuestra propuesta aparecen conductores de bicitaxis; si había un oso con su entrenador, ahora tenemos una escultura móvil; en lugar de enfermeras, propones una ambulancia con mujeres cúbicas. La partitura es la misma de principio a final”, asevera el director.

“Como la musicalidad es parte fundamental de este ballet, respetamos cabalmente la partitura original. El argumento, que estuvo a cargo de Stravinski y Alexandre Benois, tiene unos ligeros cambios en cuanto a las escenas por la incorporación de nuevos personajes; cambia un poco el guión, aunque priva la misma secuencia”, asegura el coreógrafo.

Petruska se presenta en el Palacio de Bellas Artes con el apoyo de la Dirección de Danza de la Universidad Nacional Autónoma de México y el programa Alas y Raíces de Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.