Para crear corresponsabilidad en la sociedad en el cuidado y protección del patrimonio de la zona arqueológica de la antigua ciudad de Teotihuacan, ubicada en el Estado de México y próxima al Distrito Federal, el Instituto Nacional de Antropología e Historia creó el proyecto de antropología aplicada denominada "INAH en la comunidad".

Tal iniciativa comprende tres estrategias: agropecuaria, medioambiental y educativa. Esta última se apoya principalmente en el "Noticiero de Beto Bozinah" que recorre las 18 escuelas primarias y secundarias del Valle de Teotihuacan.

Además, el motivo de este proyecto es que más de 93 por ciento de la evidencia de la antigua Teotihuacan se encuentra sepultada al interior de ocho comunidades contiguas a la zona arqueológica, destaca un comunicado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

La también llamada Ciudad de los Dioses es un importante foco turístico con cuatro millones de visitantes al año, lo que ha derivado también en el desarrollo urbano acelerado de los municipios.

En San Juan Teotihuacan y San Martín de las Pirámides hay en la actualidad cerca de 70 mil habitantes y de persistir esta tendencia, alcanzará los 200 mil pobladores para 2025.

Añade el boletín que ante esta realidad, es necesario conocer y transformar las prácticas sociales de acceso y uso del patrimonio que se han dado con el tiempo, destacó el arqueólogo Jaime Delgado Rubio, quien encabeza la iniciativa de antropología aplicada denominada "INAH en la comunidad", que emplea distintas estrategias de vinculación, mismas que pueden conocerse en el portal de Internet http://www.inahcomunidad.org

El proyecto "INAH en la comunidad" cuenta con un equipo multidisciplinario compuesto por los arqueólogos; Juan José Guerrero y Dulce María Ramírez, el biólogo Francisco Javier Bertaud, la ingeniera en Biotecnología Karina López Bucio y la restauradora Yuristzi Bautista López.

Uno de los principales éxitos de "INAH en la comunidad" es la transmisión del citado noticiario que se vale de títeres para explicar desde cómo eran los antiguos teotihuacanos, hasta sorprender con recientes hallazgos, y lo más importante, conocer la manera en que pueden cuidar su entorno. En él han participado destacados arqueólogos como Rubén Cabrera y Sergio Gómez Chávez, además del periódico infantil "Noticonfundas".

Respecto a la estrategia agropecuaria, ésta tiene como objetivo incentivar la producción del campo, para lo cual se ha dado un acercamiento con algunos ejidatarios para ofrecer cultivos de bajo impacto al subsuelo (orégano para extracción de aceite, maíz y frijol mejorada y verdura orgánica), respetando la vocación productiva de la región.

El proyecto apoya a pequeñas empresas agroindustriales para promover sus productos en otros mercados bajo una etiqueta que denomina a sus productos como co-responsables en la conservación de los vestigios arqueológicos de Teotihuacan.

Dentro de la estrategia medioambiental se ha motivado a los niños para que capturen en fotografías la vida cotidiana, oficios, así como la flora y fauna que se ve amenazada por la mancha urbana, imágenes que se exhiben después en espacios concurridos de los municipios cercanos.