Ellas atribuyen el éxito al trabajo colegiado, a la responsabilidad de los alumnos y a la participación de los padres de familia.

Lo cierto es que las profesoras del turno vespertino de la escuela primaria "Acatonalli", en Xochimilco, sienten orgullo de haber preparado a los estudiantes que colocaron al plantel en el sexto lugar de los mejores del Distrito Federal y en el primero dentro de los 10 comparables en su rango.

Sus alumnos ya egresaron a nivel secundaria, pero ganaron el reconocimiento de haber estado entre los mejores resultados del Examen Diagnóstico para Alumnos de Nuevo Ingreso a Secundaria 2003.

María Guadalupe García, supervisora general del sector 39 de la SEP, atribuye gran parte del éxito a la anterior directora, Irene Solórzano, por fomentar el trabajo coordinado entre el personal, realizar una excelente gestión y llevar a la práctica los acuerdos.

"Ella se preocupaba por ver qué estaba pasando dentro de las aulas, por qué los niños no aprendían y ver qué se podía hacer, además hay mucha participación de los papás; la escuela les rinde cuentas y se ha ganado el prestigio de la comunidad".

En este proceso, añade, tuvo mucho que ver la selección del personal docente para sexto grado: "Puso a maestros con más capacidad para analizar documentos".

Y es que tratar con niños en proceso de cambio no es tan fácil, comenta Olga Galicia Gutiérrez, una de las orgullosas profesoras de este nivel: "Para sexto hay que tener más paciencia, yo trato de establecer mucho diálogo con ellos para llegar a acuerdos, no es tanto estarlos molestando con que estate quieto y eso".

Rosa Guadalupe Saldaña, otra de las maestras, se refiere a su técnica: "Yo hago un seguimiento cotidiano de los trabajos y en su persona porque es muy importante la presentación, que tengan esos hábitos, aquí no hay más que trabajo constante".

Teresa Serralde Jiménez, profesora también, se refiere a los libros de texto como método de apoyo: "Traen muchas actividades para experimentar en la naturaleza, geografía e historia; además trabajo con actividades complementarias a la currícula para que se expresen con obras teatrales y exposiciones".

La "Acatonalli" es una escuela de calidad, sin embargo la falta de cristales en las ventanas evidencian la escasez de recursos con que cuenta para su mantenimiento.

Sus 371 alumnos del turno vespertino, distribuidos en 15 grupos, llegan por la tarde a la calle Escudo Nacional sin número, provenientes principalmente de la colonia Nativitas Tulyehualco, de familias de escasos recursos a las que no preocupa la distancia o la oscuridad al final de clases diarias.

"Esta es población que difícilmente se cambia aunque les quede retirado el plantel", señala la maestra María Guadalupe García.

El compromiso para el nuevo director Julián Solares Gerardo, expresa él mismo, es mantener a la escuela en buen nivel y el reto es superarlo, para beneficio de los propios alumnos.