Ecatepec, Méx. A un año de que el mecánico José Luis Nieto Ávila matara a dos pequeños del kínder "Gabriela Mistral" y lesionara a 20 más, luego de atropellarlos intencionalmente cuando realizaban honores a la Bandera Nacional, los padres de familia se sienten olvidados por las autoridades y exigen sentenciar ya al mecánico y que se deslinden responsabilidades contra la directora del plantel.

En la calle Clavel aún quedan rastros de la tragedia. Dos cruces blancas pintadas en el pavimento, afuera de lo que era el jardín de niños, indican el sitio donde quedaron los pequeños cuerpos de Ariana Martínez Villarreal, de cuatro años, y Rodrigo Reyes Ríos, de tres.

El inmueble que operaba como kinder ahora es una casa en renta; sin embargo, afuera continúa un pequeño altar en memoria de los menores, una vitrina de cristal donde los familiares colocaron imágenes de un Ángel de la Guarda, la Virgen de Guadalupe y los juguetes favoritos de los niños.

José Luis Nieto está preso en el penal de Chiconautla desde hace un año, luego de que aceptara que intencionalmente arrolló con su camioneta pick up a más de 20 menores, por añejos problemas con su vecina, la directora del jardín de niños, María del Socorro Bibriesca Martínez.

"Voy a contar hasta tres, si no me dan espacio les voy a echar el carro encima", fue lo dicho por el mecánico antes de cumplir su amenaza, aquel 6 de mayo del 2002.

Vecinos y padres de familia, solicitaron que las autoridades deslinden responsabilidad penal contra la directora Socorro Bibriesca, toda vez que pese a las amenazas y conflictos con el mecánico, sacaba con frecuencia a los niños a la calle.

"Ya se cumplió un año de la tragedia y todavía no dictan sentencia al asesino de mi hija. Sólo pido que se haga justicia y el que tenga culpa que la pague", pidió Martha Villarreal Rivera, madre de su pequeña hija Ariana.

Evangelina Lara Alcántara, directora de Prevención y Readaptación Social del estado de México, informó que el mecánico está aislado de la población de reos, toda vez que "sus compañeros lo han agredido por la forma en que cometió su delito".

La funcionaria informó que los exámenes sicológicos realizados a Nieto lo definieron como "antisocial, neurótico, pero que no está loco"; es decir, que su actuación contra los menores fue con plena conciencia.

En la casa de Ariana, sus padres conservan un altar don las fotos de la niña y su compañerito Rodrigo. Ayer colocaron dos veladoras junto a la mochila que utilizaba su hija. Mientras que los restos del pequeño descansan en un pueblo de Ejutla, Oaxaca.

Cristina Vázquez Pacheco, madre de Ana Karen, también lesionada hace un año, aseguró que la niña aún padece secuelas. "Se volvió muy nerviosa, irritada al pasar por la calle (Clavel), ya está en la primaria pero todavía no olvida la tragedia. Pedimos que se haga justicia y que el señor (Nieto) no salga libre y a la directora exigimos que también se le castigue".