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Lentos fluyeron los votos en el Estado de México. La húmeda y fría mañana del 3 de julio paralizó a la ciudadanía que no visitó las casillas ni con el sol del mediodía y menos con la tormenta que se registró por la tarde en gran parte de los municipios mexiquenses.

Recorridos de EL UNIVERSAL constataron la baja participación en la jornada electoral: lucieron por doquier urnas semivacías. Como en la colonia El Sol, en Nezahualcóyotl, donde los habitantes cumplieron su palabra de no salir a votar.

El enojo por las aguas negras que, como el año pasado, inundaron sus casas por el desbordamiento del Dren Xochiaca en días pasados, además de la lluvia que volvió a caer por la tarde del domingo, reflejó una escasa asistencia a las casillas.

En Valle de Aragón Segunda Sección, también en Neza y otra de las comunidades afectadas por las inundaciones, el abstencionismo apareció desde temprana hora, porque hubo reubicación de casillas —sin previo aviso— que provocó la confusión de miles de electores.

A pocas calles estaba el campamento del Ejército Mexicano que aplicó el Plan DN-III para ayudar a damnificados y en ocasiones patrullaban las calles, aunque ahí ya no había lodo ni agua pestilente.

En Ecatepec, calles semivacías y atrincheradas con costales de arena, muebles abandonados, colchones, ropa y el hedor a caño y animales muertos eran el escenario de las colonias Valle de Aragón Tercera Sección, Arboledas, Renacimiento y Solidaridad.

“No vamos a votar, estamos indignados, no queremos votación, queremos solución”, dijo con voz firme Lourdes Almanza, una de las afectadas por la inundación, mientras arrojaba al cúmulo de cosas inservibles en la calle, una bolsa con juguetes y ropa de sus dos hijos.

“Yo ahorita no estoy para ir a perder el tiempo a la votadera, mejor trato de limpiar mi casa y de rescatar lo poco que me quedó”, afirmó con enojo.

En una de las casas afectadas colgaba una lona del candidato priísta Eruviel Ávila, y al cuestionarle a la dueña del inmueble si votaría, simplemente dijo que ya no.

En tanto, unos 50 vecinos afectados por las inundaciones se manifestaron sobre carriles laterales de la Avenida Central, horas más tarde se retiraron del lugar. Otro tanto de los afectados denunciaron la entrega de despensas a cambio de sus votos.

En Chalco y Valle de Chalco también se observó una baja afluencia de votantes. En Tejupilco, Amatepec, Tlatlaya y Luvianos, la apatía, el trabajo y el hambre contribuyeron a que casi la mitad del electorado no acudiera a las urnas, según datos preliminares del órgano electoral del estado. (Con información de Geovana Royacelli, Juan Manuel Barrera, Sara Pantoja, Fabiola Cancino, Eduardo Alonso y Rebeca Jiménez)