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Vecinos de las colonias afectadas por el desbordamiento del río de Los Remedios en el municipio de Ecatepec, amenazan con no acudir a votar e impedir la instalación de casillas este domingo en la elección para gobernador del Estado de México.

“No saldremos a votar”, dice doña Ernestina Mendoza, quien tratando de resguardarse de la lluvia se muestra indignada por la falta de apoyo de las autoridades municipales y estatales. “Cuando necesitan nuestro voto, casa por casa vienen a tocar. Ahora que sufrimos esta desgracia ni se toman la molestia de venir a vernos”, reclama.

Doña Ernestina Mendoza vive en Nicolás Bravo, en Ecatepec, una de las colonias que resultó más afectadas por las inundaciones; el nivel del agua en su casa subió casi un metro de altura y lo perdió todo. “Eran las nueve de la noche cuando escuchamos un fuerte ruido, el agua comenzó a correr con gran fuerza y en pocos minutos nuestras casas quedaron bajo las aguas negras”, relató.

Ella vive con sus hijos a escasos metros de la casa que fue derribada por la presión del agua, y uno de los puntos por donde ésta se filtró a la colonia.

En un recorrido que realizó EL UNIVERSAL por las colonias Nicolás Bravo, Renacimiento de Aragón, Paullada, CROC Aragón, Nuevo Valle de Aragón, Ejército del Trabajo, Granjas Independencia, Franja Valle de México, todas ellas colindantes al río de Los Remedios, el sentir de los habitantes fue de indignación e impotencia ante la falta de apoyo de las autoridades mexiquenses.

“No es la primera vez que sucede esto, año con año nos prometen darle solución al problema de las lluvias, pero a la fecha nos seguimos inundando. No queremos comida, ni despensa, exigimos que nos solucionen este problema del río”, pidió Joel Martínez, vecino de la colonia Renacimiento de Aragón, quien perdió parte de su patrimonio, las aguas negras arrasaron con el primer piso de su domicilio.

“Varios vecinos de la colonia nos estamos organizando para impedir la instalación de casillas este próximo domingo; ahora las autoridades ya no nos verán la cara, porque cuando están en campaña nos ofrecen despensas, gorras, cubetas, ahora quien les va a llevar cubetas soy yo, pero llenas con aguas negras”, dice molesto el señor Martínez