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Se quitó la ropa y la amontonó en un mismo lugar, luego la roció con gasolina y le prendió fuego. Junto con su familia contemplaba el hecho como una cábala que se maneja entre los reos de las prisiones capitalinas que significa no volver a ese lugar.

Carlos Cázares, mejor conocido entre sus amigos como El Charly, ayer abandonó el Centro de Readaptación Varonil Sur luego de que un juez federal determinó que no existen las pruebas suficientes para inculparlo por el delito de planeación y premeditación de tentativa de homicidio en contra del futbolista Salvador Cabañas quien fue agredido de un disparo en la cabeza por José Jorge Balderas Garza El JJ en el Bar Bar, el 25 de enero de 2009.

Tras una espera de más de 5 horas, familiares y amigos de El Charly, así como representantes de los medios de comunicación recibieron a Carlos Cázares en su salida del Reclusorio Sur, quien en sus primeras expresiones comentó: “es un mal sueño del que estoy despertando. Todo lo veía muy raro como en tercera dimensión. El sentimiento de libertad es algo inexplicable y es entendido por quienes han estado encerrados tanto tiempo”.

El ex gerente del Bar Bar abandonó el centro penitenciario luego de un año de encarcelamiento. A su salida comentó ante los medios de comunicación estar muy decepcionado por la actuación de la Procuraduría capitalina y se quejó también de la acción de Televisa por presuntamente haber editado los videos de los hechos, situación que le costó un año de prisión.

“Sabemos que Televisa manipuló los videos. No sé cómo se dejaron manipular las autoridades con esas imágenes”, cuestionó Cázares, y agregó que demandará por daño moral a la televisora y a la PGJDF, “que me mantuvieron privado de mi libertad más de un año, afectándome a mi y a mi familia”, dijo.

Mencionó que intentó varias veces comunicarse con Salvador Cabañas, pero al parecer el ex jugador del América cambió todos sus números telefónicos, y expresó que seguirá buscando al futbolista para estrechar su mano y darle un abrazo.

Por otra parte, los tres ex policías de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE) que escoltaban a El JJ el día del ataque al futbolista, alcanzaron su libertad después de que se reclasificó el delito que les imputaban.

La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) confirmó que los ex policías Mario Zamarripa, Margarito Cruz y Mariano López serán procesados por encubrimiento por favorecimiento, delito no grave que alcanzó la libertad caucional.

Lo anterior, luego de que todos ellos obtuvieron un amparo del Juez Séptimo de Distrito en esa materia, en el que se dejó sin efecto el auto de formal prisión que se les dictó hace un año por tentativa de homicidio, al considerar que no había elementos suficientes para procesarlos por ese ilícito.