Se disputan a golpes el auditorio "Che Guevara"
EXHIBICIÓN. Cerca de 40 personas se enfrentaron a seis jóvenes que dormían en el lugar y tras desalojarlos exhibieron envases de botellas de bebidas alcohólicas, balas, chacos, además de varias pipetas y tubos de ensayo con los que se presume se elaboraban diferentes tipos de narcóticos adentro del espacio universitario. (Foto: NURIT MARTÍNEZ EL UNIVERSAL )
nurit.martinez@eluniversal.com.mx
Estudiantes de diversos colectivos que mantienen bajo su resguardo desde hace 14 años el auditorio Justo Sierra, conocido desde 1968 por la comunidad como Che Guevara, en la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la UNAM, se disputaron una vez más a golpes y proyectiles improvisados, las instalaciones en las que alguna vez dictara conferencia Pablo Neruda u ofreciera un recital la Orquesta Filarmónica de esa casa de estudios.
Un grupo de alrededor de 40 personas encapuchadas se enfrentaron a seis jóvenes que dormían en el lugar y al desalojarlos mediante golpes exhibieron a las puertas un centenar de envases de botellas de cerveza y vino, balas, chacos, aceite, además de que colocaron las pipetas y tubos de ensayo con los que se presume se elaboraban diferentes tipos de narcóticos.
“Esto es por lo que decidimos entrar al auditorio Che Guevara. ¡No más narcomenudeo! Respeto a los espacios universitarios críticos y de lucha”, se leía en la manta que coronaba la colección, incluso había plantas de lo que se aseguró era mariguana, así como cigarrillos de dicho estupefaciente.
Alrededor de las dos de la tarde el emblemático espacio fue escenario de una batalla en la que las botellas de cerveza o vino, cohetones, palos, tubos, mazos, sopletes, pistolas de diábolos y hasta una mesa, fueron las armas de lucha.
El saldo por los enfrentamientos fue de cinco personas lesionadas y un joven retenido por cuatro horas, que fue entregado a personal de Atención a la Comunidad y Protección Civil de la institución.
Comunicado de la UNAM
A través de un comunicado, la rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) anunció por la noche que se levantará una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR) por el enfrentamiento entre dos grupos que se disputan el auditorio.
La autoridad universitaria también exigió a los grupos de jóvenes anarquistas y grupos sociales “la entrega inmediata del auditorio ocupado en forma ilegal”.
Luego de repudiar la violencia registrada, la rectoría confirmó la suspensión de actividades —de casi 16 mil personas— en la Facultad de Filosofía y Letras, para “resguardar la seguridad de los alumnos, maestros y trabajadores”.
Esta decisión fue tomada con base en la información que proporcionó la comisión local de seguridad de la facultad.
La UNAM dio a conocer que el pasado 19 de diciembre de 2013 “un grupo de personas desalojó violentamente a quienes ocupaban en forma ilegal el auditorio”.
Sobre los acontecimientos, hace casi tres meses, se presentó la denuncia PGR/DF/SZS-II/3550/2013.
El auditorio ha sido sede de las asambleas estudiantiles desde 1968, cuando el Consejo de Huelga le otorgó el nombre de Ernesto Che Guevara, en honor al emblemático guerrillero argentino.
El espacio volvió a colmarse de alumnos entre 1986 y 1987, cuando el Consejo Estudiantil Universitario (CEU) lo convirtió en sede de sus debates; mientras que para 1999 lo hizo el Consejo General de Huelga, convirtiéndolo en espacio de “resistencia y rebeldía”.
El 6 de febrero de 2000 la Policía Federal detuvo a cientos de jóvenes y adultos que participaban en una asamblea estudiantil, tras diez meses de paro estudiantil en la Máxima Casa de Estudios.
Después de esos hechos, el auditorio perdió las butacas y la alfombra que revestía el espacio.
En septiembre de 2000, grupos radicales del Consejo General de Huelga se volvieron a apropiar del lugar y convirtieron el auditorio en sede de una galería o espacios para talleres de serigrafía y fotografía.
En la división del botín, el grupo de radicales ubicó en el anexo un comedor popular vegetariano, así como sede de radio XEUE-Voz, esto es Radiokupa.
Las agrupaciones que se disputan el sitio dicen pertenecer a colectivos de anarquistas, comunistas, zapatistas, frentes populares, brigadas estudiantiles, organizaciones indígenas en el Distrito Federal y hasta el Frente Oriente.
Sobre lo ocurrido, la UNAM explicó que a las 13:15 horas un grupo de 25 embozados se presentaron ante el auditorio y retomaron las instalaciones de las que fueron despojados en la madrugada, lo que suscitó el enfrentamiento para la recuperación del lugar.
‘La artillería’
El arsenal de botellas, piedras, palos, tubos, chacos y hasta la mesa en la que estaba la exhibición sirvieron para golpear las rejas y derribar la barricada colocada en ese sitio.
La turba de jóvenes ingresó al auditorio, sólo que los encapuchados emprendieron la huida por una puerta alterna.
David Moreno Palacios, quien fue alcanzado en el estacionamiento de la facultad, dijo, mientras era jaloneado, pertenecer a la Escuela Normal Rural de Veracruz. Ahí aseguró: “Ellos (sin revelar quiénes) nos trajeron de comisión a hacer guardia al ‘Che’”.
En una improvisada asamblea, los jóvenes determinaron interrogarlo fuera de la mirada de los medios de comunicación y cuatro horas más tarde fue entregado a las autoridades de la UNAM.
De los cinco jóvenes que dormitaban en el lugar en una “guardia”, dos de ellos informaron que alrededor de las 4:30 de la madrugada llegaron aproximadamente 40 personas encapuchadas y tras utilizar sopletes, los golpearon, les aplicaron electroshock y hasta dispararon con pistolas de balines.