Neza: hallan cuerpo en bolsas de plástico
HALLAZGO. Los canes olfateaban con insistencia el bulto en la calle, por lo que los vecinos se acercaron y se percataron que eran restos humanos. (Foto: MICHEL NARVAEZ / EL UNIVERSAL )
rebeca.jimenez@eluniversal.com.mx
NEZAHUALCÓYOTL, Méx.— Los perros olfateban con insistencia tres bolsas de plástico de color negro que estaban tiradas junto a la parroquia de Ciudad Lago.
Se trataba del cuerpo desembrado de un hombre.
Vecinos de esta zona de Nezahualcóyotl llamaron a la policía municipal luego de que se percataron que en el interior de las bolsas había restos humanos.
Al llegar, la policía local constató que en tres bolsas de plástico negras separadas se encontraba la cabeza, en otra el brazo izquierdo y en otra más grande el resto del cuerpo, además de que la víctima tenía al menos cinco balazos, tres de ellos en la cara.
Las bolsas de plástico fueron abandonadas en la esquina de las avenidas Alta Tensión y Aeropuerto, frente al número 23 de la colonia Ciudad Lago, en las inmediaciones de la parroquia de esta comunidad.
De forma extraoficial trascendió que la víctima era un hombre de entre 35 y 40 años de edad.
Al lugar llegó personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), específicamente el Ministerio Público de la Fiscalía de Homicidios de Nezahualcóyotl, para iniciar las investigaciones sobre este homicidio y verificar si el contenido de las bolsas de plástico pertenecían a una sola víctima.
Para tal efecto, trasladaron los restos encontrados al Servicio Médico Forense municipal para su análisis.
Cadáver flotando en aguas negras en Chalco
También en la zona oriente del Estado de México, vecinos encontraron, ayer, el cuerpo de un hombre flotando sobre las aguas negras del canal de Acapol, en el municipio de mexiquense de Chalco.
Un grupo de personas que caminaban a un costado del canal de aguas negras, en las inmediaciones de la avenida Acapol y la calle Axacayatl, en la colonia Xico 4, se percataron de que en la corriente turbia sobresalía el cuerpo hinchado de un hombre.
Por su estado de putrefacción, presumiblemente el cadáver tenía varios días en el arroyo.