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La empresa concesionaria Corredor Eje4-17M del Metrobús y cuyo vehículo fue incendiado el pasado miércoles, por un grupo de encapuchados del movimiento autodenominado Anarquista, señaló que este hecho les representa pérdidas en todos sentidos, en principio porque aún no terminaban de pagar el autobús, que en 2011 costó 4 millones 739 mil pesos.

La aseguradora sólo va a responder por la cantidad de 3 millones 800 mil pesos — monto por el que quedó asegurado—, ya que se tomó en cuenta la devaluación del vehículo”, explicó Jesús Martínez González, gerente general de Corredor Eje4-17M.

Señaló que tendrían que esperar cerca de cuatro meses para a contar con un autobús con las mismas características y detalló: “como empresa ya habíamos pagado tres años de dicha unidad, nos faltaban dos, por lo que esta situación en números nos representa una pérdida”.

Con toda su flota operando durante la semana, la empresa alcanza en promedio 50 mil kilómetros. El Metrobús paga cada kilómetro en 25.50 pesos, “es así como la empresa subsiste y al perder esta unidad, por supuesto vamos a dejar de ganar kilómetros que se traducen en dinero”, abundó.

El día de los hechos

Ese día el chofer del Metrobús alcanzó a avisar que en la estación Ciudad Universitaria lo habían detenido unos encapuchados, precisó Martínez González.

Durante su declaración ante las autoridades, el operador señaló que los encapuchados lo obligaron a bajar del autobús y también a los pasajeros, pero antes, tuvo que atravesar el vehículo para impedir la circulación.

No lo dejaron tomar sus documentos y le dijeron que iban a prender la unidad y que se alejara pronto.

“Nuestro operador, nos volvió a llamar y nos trasladamos al lugar, pensamos que no se atreverían; sin embargo, a lo lejos vimos las llamaradas”, acotó el empresario.

De acuerdo con el chofer, eran unos 25 hombres, quienes luego de romper los vidrios del vehículo comenzaron a lanzar en su interior bombas molotov con gasolina y petardos.

Los individuos no se cubrieron el rostro ante el chofer, razón por la que los dos detenidos pudieron ser identificados en la delegación.

“Dijeron que eran estudiantes, pero no tuvieron con que identificarse”, dijo Martínez.

A la delegación llegó un grupo de 70 personas, “querían liberar a los dos detenidos y negociar con “una lana”, sólo que el autobús no cuesta “una lana”, concluyó.