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El jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, dijo que durante los hechos vandálicos registrados la noche del lunes se recurrió al uso de la fuerza pública como último recurso, para proteger la integridad de las personas y garantizar la seguridad de los comercios.

“Lo que menos queremos es utilizar la fuerza, pero cuando hay que proteger, como hubo que proteger a los establecimientos o personas, pues hay que hacerlo”, afirmó.

Mancera destacó que la marcha realizada la tarde-noche del lunes, en la que participaron alrededor de siete mil personas, se desarrolló con tranquilidad y sólo fue un grupo de 60 encapuchados “que no tienen nada que ver” con el contingente, quienes realizaron desmanes.

La megamarcha se realizó para exigir el regreso de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, Guerrero. Por los actos vandálicos fueron detenidas tres personas: Demián Reyes Lara, estudiante de Filosofía y Letras de la UNAM; Ariel Flores Pérez de la Vocacional número 9, y Óscar Espinosa Triguero, del CCH Oriente.

Los tres fueron acusados por los delitos de ataques a la paz pública, ultrajes a la autoridad y portación de objetos aptos para agredir, dijo la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).

En entrevista radiofónica, el secretario de Gobierno, Héctor Serrano, informó que a los detenidos les fueron encontrados 14 cohetones, dos bombas molotov y dos tubos.

Además hay fotografías y videos en los que se acredita su participación en los hechos violentos.

Serrano Cortés comentó que estos grupos que acuden a las movilizaciones con el rostro cubierto tienen el claro objetivo de delinquir. Dijo que por ello es necesario revisar el tema para evitar que bajo la protección de máscaras sigan cometiendo este tipo de actos.

Mancera confió en que la marcha convocada para el próximo sábado se desarrolle con tranquilidad.