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El edificio Centauro, de 16 pisos, ubicado en la colonia Doctores, se ha mantenido de pie durante 44 años en los cuales ha resentido diversos sismos, incluido el terremoto de 1985, en el cual— recuerdan algunos vecinos— se tuvo que contratar un peritaje específico que descartó daños estructurales, ya que el temblor tiró escaleras, aplanados, algunos muros y agravó una separación de muros contiguos precisamente en el área de escaleras.

Desde entonces, la separación de esos muros, tapada con láminas, es parámetro de los condominios para saber qué tan fuerte fue un temblor, como el de 7.2 grados en la escala de Richter, registrado la mañana del 18 de abril de este año, el cual provocó numerosas grietas, desprendimientos y tiró varias láminas que cubren la abertura de hasta medio metro.

Irma Ybarra, quien ha vivido 37 años en el tercer piso del inmueble, recuerda que en cada sismo crujen los muros y las autoridades sólo realizaban revisiones superficiales. “Acuden después de un sismo, pero siempre a la siguiente semana se olvidan de nosotros”.

Recomiendan desalojar inmueble

Ahora, los vecinos enfrentan la posibilidad de no poder regresar a sus casas. La delegación Cuauhtémoc, después de una primera revisión, recomendó desocupar el inmueble para una segunda evaluación en la que probablemente sea necesario el reforzamiento del edificio, para lo cual tendrían que desalojar el inmueble, pero no todos los vecinos lo hicieron. Los integrantes de 16 familias regresaron bajo su riesgo. “No es tan fácil irnos, no tenemos a dónde”, expresan los afectados.

Peligro latente

Nancy Cruz, quien vive en el cuarto piso, muestra el boquete que queda entre dos muros y explica: “Se hacen más amplias conforme a los movimientos telúricos pero con las réplicas y el paso del tiempo se vuelven a cerrar”.

La separación de muros también ocurre en los otros cuatro edificios de 16 pisos de la Unidad Habitacional Morelos, ubicada en Doctor Lucio, por lo que se requiere un estudio profundo para conocer la magnitud y plantear soluciones al fenómeno en estas torres, dice el delegado en Cuauhtémoc, Alejandro Fernández.

“Vamos a solicitar al gobierno del Distrito Federal, a la Asamblea Legislativa y a la propia demarcación recursos para estudiar los movimientos de los condominios”, planteó el jefe delegacional en entrevista y ante vecinos del edificio en una reunión anoche.

De los 56 departamentos de uno de los condominios se encuentran desocupados 40, ya que el viernes se les recomendó desalojarlos.

Pero no todos los vecinos se encontraban en sus domicilios, algunos son habilitados como despachos de trabajo, y revisaron el estado de sus departamentos hasta ayer en la mañana. De acuerdo con vecinos, 70% de los departamentos tienen uso habitacional y el resto son oficinas.

Nancy comenta que el sismo de este viernes, “sí se notó más ahora, estuvo más fuerte”.