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Lo alertó cuando inició su discurso: tendremos que desalojar. Mientras estaba convocando a un grupo de empresarios nacionales a establecer una alianza estratégica para impulsar a la Ciudad de México, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, interrumpió sus palabras para salir del salón ubicado en el séptimo piso de un hotel de Polanco.

El detonante fue la alarma sísmica y el motivo fue el macrosimulacro que este 2013 organizaron las autoridades capitalinas.

10:00 horas. Al sonar la alerta sísmica, el mandatario capitalino hizo un alto en su discurso y exclamó: “¡Vamos a tener que desalojar!”, y tras saludar a empresarios salió del salón y se ubicó en la zona segura, que es la terraza. Se formó en una de las 10 hileras.

Mancera estuvo al frente y a su costado, el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin), Francisco Funtanet, y del otro, Valentín Diez Morodo, presidente del Consejo Empresarial de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología. Era el evento inaugural de la reunión anual de los empresarios nacionales.

Tras permanecer unos minutos afuera, la brigada de protección civil del hotel dijo que podrían regresar al salón.

Mancera dijo: “Bien, ¿no?”, y regresó a concluir su discurso, destacó la importancia del ejercicio e inauguró formalmente la reunión de industriales.

Esta escena se repitió en 17 mil edificios públicos y privados —según estimaciones iniciales del Gobierno del Distrito Federal— a las 10:00 horas: el Antiguo Palacio del Ayuntamiento en el Gobierno capitalino, la Torre Latinoamericana -donde tardaron 15 minutos en desalojar aproximadamente mil personas-, la Torre Mayor, hoteles y escuelas públicas y privadas.

Esta vez las sirenas de las ambulancias no se escucharon.

Monta guardia de honor

En punto de las 7:19 horas, el silencio llegó a la Plaza de la Solidaridad, donde el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, montó una guardia de honor e izó a media asta la bandera, en memoria de las víctimas de los sismos de 1985.

Junto con el gabinete y representantes de cuerpos de emergencia, pidió un minuto de silencio y luego se interpretó el toque de silencio. El sol apenas se asomaba.

Tras izar la bandera a media asta, Mancera aseguró que la Ciudad de México “hoy todavía está triste por los sismos de 1985”. La capital del país resurgió de aquella tragedia y ha aprendido de su pasado, agregó. Refirió que se sigue trabajando para reforzar los cuerpos de emergencia ante un posible desastre.

Participación ciudadana

Durante el ejercicio que el gobierno del Distrito Federal (GDF) organiza cada año para conmemorar los sismos de 1985 se desalojaron edificios, pero sin el despliegue de cuerpos de emergencia —como ocurría en años anteriores—, y se hizo la revisión de 500 puntos de riesgo.

Según el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, en el megasimulacro se tenía prevista la participación de alrededor de 6 millones de personas.

El secretario de Protección Civil capitalino, Fausto Lugo, comentó que los resultados del ejercicio se darán a conocer en dos semanas, para hacer una evaluación detallada de la forma en que se aplican los programas internos de protección civil. Destacó que en el DF hay 300 inmuebles que presentan riesgo en materia de protección civil.

En tanto, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina informó que se utilizaron dos helicópteros Cóndor para vigilar las evacuaciones de los sismos y las marchas que en ese momento se estaban realizando en las calles de la Ciudad de México.