claudia.bolanos@eluniversal.com.mx 

En una casa de la Unidad Habitacional Ejército de Oriente, perímetro de Iztapalapa, acompañada por no más de 20 personas, y bajo un dispositivo policiaco, Monserrat Loza Fernández, una de las 13 víctimas del bar Heaven, fue velada.

La joven, madre de dos niños de siete y nueve años, fue despedida ayer por sus familiares luego de que el 25 de mayo pasado salió de su casa para ir a bailar, y a la mañana siguiente, junto con otros de sus conocidos, fue secuestrada por un grupo armado en el bar Heaven de la Zona Rosa, y luego asesinada, según las investigaciones.

El 22 de agosto, sus restos fueron hallados en una fosa clandestina de Tlalmanalco, Estado de México.

Su féretro fue blanco y la mayoría de sus familiares iban también vestidos de ese color, el mismo de las flores que la acompañaron en su cortejo fúnebre hacia el Panteón San Isidro, en Azcapotzalco, donde fue sepultada.

El sábado pasado, el padre de la joven, quien tenía 28 años, pudo ver los restos que la Procuraduría General de la República (PGR), identificó como los de su hija, para luego entregarlos a la procuraduría capitalina. El hombre decidió observarlos, y los reconoció como los de Monse.

Sin embargo, para tener mayor certeza pidió que dos personas más de la familia les fuera permitido ver el cadáver, narró su tío Abraham Fernández Alcántaraa.

En uno de los andadores de dicha unidad habitacional, fue colocada una carpa blanca, la cual estuvo custodiada por ocho elementos de la Policía Sectorial, y por lo menos dos de ellos llevaban armas largas.

Don Abraham explicó que al desconocerse quién estuvo detrás del homicidio de los 13 jóvenes plagiados, es que se decidió enviar elementos de seguridad como una medida de prevención.

También la procuraduría capitalina ofreció costear los gastos funerarios, pero la familia de la víctima no lo aceptó, y por cuenta propia contrataron los servicios de la Funeraria García.

Hasta ayer se esperaba que los restos de Alan Francisco Daniel Menchaca Bazán fueran también entregados, como lo solicitó el padre de la víctima 13 del Heaven.