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El Estado de México es prácticamente una puerta libre para conductores ebrios, toda vez que municipios metropolitanos mexiquenses no aplican programas de alcoholímetro, luego de que la Secretaría de Seguridad Ciudadana ordenó la suspensión de infracciones de tránsito desde el pasado mes de abril.

Municipios limítrofes con el DF como Huixquilucan, Naucalpan, Tlalnepantla y Nezahualcóyotl, entre otros, con excepción de Ecatepec, no aplican operativos con alcoholímetros para detectar conductores ebrios.

Durante las fiestas decembrinas aumenta exponencialmente el consumo de alcohol y de conductores ebrios, muchos de los cuales buscan salir del DF, donde desde esta semana creció el horario del alcoholímetro.

En el Estado de México ya no hay alcoholímetros, pues al estar suspendidas las infracciones de tránsito los alcaldes de Naucalpan y Tlalnepantla y Atizapán, que cuentan con programas específicos de alcoholímetro, optaron por suspenderlo.

Incluso los “Toritos VIP”, o salas de reposo para conductores alcoholizados de Naucalpan y Tlalnepantla, permanecen vacías y sin uso. En Tlalnepantla en los primeros cuatro meses de este año se detuvo a 796 conductores ebrios, 41 de ellos mujeres y dos menores de edad.

Estos “Toritos VIP”, equipados con sillones de vinipiel, televisores de plasma, desayunadores, baños privados y agua corriente, tienen más de seis meses vacíos y sin uso; incluso, el de Naucalpan está sin estrenar.

Nezahualcóyotl no aplica alcoholímetro porque el ayuntamiento no ha recibido del gobierno estatal las facultades de ejercer las funciones de tránsito, tal como lo tienen 18 localidades mexiquenses, señalaron voceros de este municipio.

La excepción es Ecatepec, donde sí se aplica el alcoholímetro, con la pena de detención corporal del conductor ebrio, quien sólo está obligado a pagar el arrastre con grúa de su vehículo, informaron voceros.