geovana.royacelli@eluniversal.com.mx 

Roberto Campa Cifrián, subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación, aseguró que las facultades en materia de salud para la regulación de la mariguana corresponden sólo al ámbito federal.

Al término del Foro Sobre Políticas Públicas en Materia de Drogas —organizado por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF)—, explicó que la política del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto ha planteado su posición “en contra de la legalización y a favor de la prevención y de un debate informado y serio que ayude a tomar decisiones”.

Sin embargo, reconoció que “hasta ahora las políticas prohibicionistas no han arrojado los resultados que se esperaban. México optó, ya hace varios años, por la despenalización a través de determinadas dosis, pero la realidad es que tampoco ha bajado el consumo ni la violencia, así que son asuntos que tenemos que discutir y revisar con gran seriedad”.

Ayer, especialistas nacionales e internacionales coincidieron en que “el Distrito Federal vive una emergencia” en materia de drogas lícitas como alcohol, tabaco e inhalantes que debe resolver antes de que inicie con la regulación de una ilícita como la mariguana, en la ciudad.

Antonio Mazzitelli, representante de la Oficina de Enlace y Patentario de la Oficina de las Naciones Unidas de la Droga y el Delito en México consideró que el problema que vive la ciudad de México con respecto a las adicciones se concentra en las drogas legales como el alcohol y el tabaco, por lo que la legislación debería encaminarse a resolver esos factores y no de una legalización de mariguana que no tiene caso.

En el mismo sentido, Rafael Camacho Solís, director del Instituto para la Atención y la Prevención de las Adicciones de la Ciudad de México, argumentó que “no hay necesidad” de regular una droga ilícita como la mariguana cuando no se ha podido controlar el acceso de los jóvenes a drogas lícitas aun cuando la ley lo prohíbe.