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Afuera de la estación del Metro Sevilla, transportistas de la Ruta 2, que va de esa estación a Ejército Nacional, se enfrentaron contra granaderos para evitar que las unidades fueran remitidas al corralón.

Sin embargo, dos camiones fueron sancionados y los transportistas denunciaron que es una medida de presión y acoso por parte de la Secretaría de Transporte y Vialidad (Setravi) para que ese ramal se constituya como una empresa.

Advirtieron que no dejarán de dar el servicio y emprenderán acciones legales para seguir operando.

El plan era inspeccionar la documentación de las unidades y remitirlas al corralón. La orden fue dada por la Setravi y participó el Instituto de Verificación Administrativa (InveaDF), según informó personal de comunicación social de la dependencia.

Acusan anomalías

El delegado de la Ruta 2, Carlos Garduño, acusó a la Setravi de acosar a los transportistas para que se constituyan como una empresa y denunció que el Invea no presentó ninguna orden de revisión para verificar los vehículos y que ordenaron “bajar del camión al chofer y al pasaje con golpes y violencia”.

Aseguró que las unidades cuentan con la documentación para operar además de que la Ruta 2 tiene dos sentencias favorables dadas por el Tribunal de lo Contencioso y Administrativo para dar el servicio.

“Verónica Ginon Pinto, directora general de transporte de la Setravi, no nos permite trabajar en el ramal Metro Sevilla-Soriana Ejército Nacional a pesar de tener conocimiento de las sentencias”, explicó.

EL UNIVERSAL buscó la versión de Setravi al respecto de las acusaciones sobre sus funcionarios pero la solicitud no fue atendida.

Violencia

De acuerdo a los transportistas, la orden de bajar al chofer a golpes la dio Guadalupe Rosales, quien tras ser acusada y negarse a proporcionar su nombre y cargo, accedió y se identificó como supervisora del operativo del Invea y negó las acusaciones.

Óscar Morales, chofer del camión, dijo haber sido golpeado por los granaderos para que bajara del camión y una pasajera, de nombre Lidia informó que también fue golpeada en la cabeza para que descendiera.

Según el chofer, en el vehículo se llevaron 5 mil pesos y toda su documentación.

Los transportistas fueron notificados de que tienen hasta el 10 de enero de 2014 para constituirse como empresa, como respuesta aseguraron que no accederán y emprenderán acciones legales penales para seguir laborando.