El sexo, un tratamiento anti-envejecimiento
El sexo frecuente y ameno también ayuda a vivir más tiempo. (Foto: Archivo EL UNIVERSAL )
Una vida sexual sana, especialmente en los últimos años, puede hacer que la persona luzca entre cinco a siete años menor, según el psicólogo David Weeks.
"Mostrarse juguetones entre las sábanas (o en cualquier otro sitio) lleva a que la liberación de las hormonas humanas del crecimiento lo que hace que la piel luzca más elástica, brillante y hermosa, lo que se traduce en menos arrugas y menos bolsas debajo delos ojos".
"Además, trabajar hasta lograr sudar en la cama puede también motivar la liberación de las endorfinas que son las hormonas de la felicidad que reducen el dolor y la ansiedad y por tanto nos ayuda a dormir mejor. Todo esto logra un estado primaveral y una apariencia más juvenil", señala Weeks.
Para Comprobar estas teorías, Weeks pasó una década entrevistando a hombres y mujeres en relación con sus vidas sexuales. Descubrió que aquellos que lucían más jóvenes que otros de su misma edad, disfrutaban del sexo realizándolo unas tres veces semanales, 50% más que aquellos que lucían mayores que su edad real.
"Si creen que un golpe fuerte, un muchas gracias, un grito feliz o cualquier otro tipo de encuentro va a borrar las arrugas alrededor de sus labios, piensen nuevamente. No se le puede decir solamente a la pareja que se deje de juegos, porque lo ideal y preferido sería hacerse una cirugía plástica para borrar las arrugas. El placer que se deriva de un encuentro amoroso que lleva a un acto sexual fuera de serie es un factor crucial en la preservación de la juventud", señala el autor.
Una investigación previa realizada por Weeks descubrió que el sexo frecuente y ameno también ayuda a vivir más tiempo. ¡Y pensar que muchas personas se pasan la vida comiendo ensaladas verdes y bebiendo agua pura! La verdad es que sería mejor entrar en este novedoso régimen anti edad.
kal