Las cenizas de la cantante Amparo Montes, quien falleció este sábado al rededor de las 20 horas víctima de un paro respiratorio, serán depositados en su natal Chiapas, según confirmó Amparo Meza Peña, única hija de la llamada "Voz Pasional de México".

Sus restos fueron incinerados ayer a las 19 horas en el panteón Español y "en una o dos semanas se esparcirán sus cenizas en el mar de Chiapas, como ella siempre quiso", añadió.

Cabe señalar que la chiapaneca permaneció 54 días internada en el hospital Santa Elena de la ciudad de México, a causa de una neumonía que la mantuvo en terapia intensiva.

A las exequias, realizadas en una conocida agencia funeraria de Félix Cuevas, asistieron un sinfín de amigos de Amparito Montes, entre los que destacó la presencia de Angélica Aragón, Pepe Jara, Alejandro Algara y el compositor José Ángel Espinoza Ferrusquilla.

Además, la intérprete de canciones como Hay que saber perder , Piensa en mí y Perfidia , fue despedida al compás de su más grande pasión: la música.

Desde las 23 horas llegaron al funeral una gran cantidad de tríos y duetos musicales, que cantaron los temas más representativos de la originaria de Tapachula, Chiapas, cuyo verdadero nombre fue Amparo Meza Cruz y de quien se desconoce si al momento de su muerte tenía 77 o 81 años de edad.

Poseedora de una voz inigualable, Amparo Montes fue una de las cantantes románticas más destacada de nuestro país, encontrando, como muchos otros artistas, en Agustín Lara y Gonzalo Curiel a sus mejores proveedores de canciones.

Montes figura entre los últimos intérpretes que definieron la época dorada del bolero en México, situada entre las décadas de 1940 y 1950.

Inició su carrera en uno de los primeros programas radiofónicos mexicanos, pero la fama llegó en las siguientes dos décadas con la creciente popularidad del bolero, estilo que se originó en Cuba y alcanzó su máxima expresión en México.

Algunas de sus melodías más conocidas incluyeron Azul , Perfidia , Hay que saber perder y Piensa en mí .

En las últimas declaraciones que concedió para EL UNIVERSAL, Montes se quejó de que "ya no hay tanto sentimiento en las canciones y la verdad se ha quedado escondida".

Además, fue reconocida por su lucha en favor de la canción popular fina, hecho que se ve reflejado en La Cueva de Amparo Montes, espacio musical en el que se presentan amantes del género romántico.

Debutó en 1938 en el programa Quiero trabajar , en donde desde el primer momento demostró su amor por el género del bolero.

En 1941 pasó a la XEW, donde comenzó su afición por las baladas. Durante su larga trayectoria grabó más de 100 discos, tanto en formato de LP como en CD.

Además, Amparito fue objeto de múltiples reconocimientos hasta el día de su muerte, en el que el pueblo de México la honra recordando sus canciones y lamentando esta sensible pérdida para la música nacional.

El año pasado, el Museo de la Ciudad de México le ofreció un homenaje a la "Señora Bolero" con la participación de Pepe Jara y José Amado, entre otros artistas, por sus 60 años de trayectoria.

Dijo ser una mujer afortunada y manifestó: "No sé si será el último homenaje que me vayan a hacer, pero siempre había sido una ilusión que ahora se convierte en realidad."