Entregan Premios Nacionales de Ciencias y Artes
Vestido de gris y con voz firme el doctor Luis Rafael Herrera fue contundente: "Aprender a jugar a la democracia no es fácil". La frase iba dirigida a Vicente Fox, presidente de la República, quien sólo sonrió ante el silencio general que imperaba en el Palacio de Bellas Artes.
Fue Herrera, ganador del Premio Nacional en el ramo de Ciencias Físico-Matemáticas y Naturales quien, a nombre de los 11 ganadores de los Premios Nacionales de Ciencias y Artes, ofreció un discurso que no por ser de agradecimiento dejó de ser crítico. Luego de recordar que no hay mejor camino hacia el futuro que el de la educación, el investigador demandó: "Los legisladores deben legislar por el bien del país y no por intereses partidistas."
Celebró la intención de que al final del sexenio se destine la cifra de 8 por ciento del PIB a la educación, instó a una verdadera reforma fiscal y eficacia recaudatoria, compartió el convencimiento del presidente acerca de la importancia de la cultura y la ciencia, pero le recomendó "traducirlo en acciones claras".
Involucrar a la iniciativa privada en proyectos científicos, proteger los derechos de autor y reconocer el valor de la creatividad fueron las peticiones para Fox del especialista en biología molecular.
Era la primera vez que la entrega del premio dejaba su tradicional sede en Los Pinos para trasladarse a Bellas Artes. Los premios, entregados desde 1945, son un reconocimiento a los mexicanos cuyas aportaciones en los campos científico, artístico y cultural, son patrimonio nacional.
Los premiados estaban en primera fila. Atrás, los invitados especiales, entre quienes estaban funcionarios e intelectuales. Ahí la escritora Martha Lamas, a un lado la astrónoma Julieta Fierro, un poco más atrás el poeta Eduardo Lizalde. Apresurado llegaba el dramaturgo Emilio Carballido, solitario arribaba el director de Imcine Alfredo Joskowicz.
Los ganadores fueron recibiendo, uno por uno, su medalla de oro y su diploma, aunque sólo hasta el fin de la ceremonia la maestra Luisa Josefina Hernández, primera premiada de la tarde, se enteró de que, entre todos, se iban a repartir equitativamente 420 mil pesos (poco más de 38 mil pesos para cada uno).
La segunda galardonada, en el mismo rubro que la primera, Lingüística y Literatura, fue Elena Poniatowska, quien pasó al estrado acompañada de sus tres nietas. Luego tocó el turno al fotógrafo Héctor García, ganador en el ramo de Bellas Artes, quien regaló al Presidente una copia de su famosa foto Niño en el vientre de cemento , bautizada así por André Malraux.
En el campo de Historia, Ciencias Sociales y Filosofía el ganador fue Adolfo Sánchez Vázquez; mientras que en el campo de Ciencias FísicoMatemáticas y Naturales los ganadores fueron Luis Rafael Herrera Estrella, Luis Fernando de la Peña Auerbach y Ricardo Jorge Tapia Ibargüengoytia.
Alexandre Balankine recogió apresurado su premio en Tecnología y Diseño, lo mismo que Ramón Mata Torres, Erasmo Palma Fernández y Juan Rivera García, ganadores en el ramo de Artes y Tradiciones Populares.
Fox, en su turno, respondió al discurso de Herrera con cifras que argumentaron el valor que da su gobierno a la ciencia y la cultura, pero además instó a Poniatowska y Hernández a que recibieran su premio a nombre personal y el de todas las mujeres que lo merecieron y nunca se les entregó.
Jesusa Rodríguez no estuvo de acuerdo en la petición, dijo que el premio compartido era un desmerecimiento, ya que compartir desacredita al propio gremio.