aviso-oportuno.com.mx

Suscríbase por internet o llame al 5237-0800




Urge transformar la agricultura ante el cambio climático

Guillermo Cárdenas Guzmán| El Universal
Martes 11 de mayo de 2010
Expertos discuten planes y acciones para duplicar la producción del agro a nivel global hacia el 2040

guicardenas@hotmail.com

Mientras algunos escépticos todavía discuten las evidencias del calentamiento global, climatólogos, agrónomos, geofísicos y otros expertos preven muchas afectaciones derivadas del fenómeno: las áreas cultivables disminuirán, las cosechas tendrán cada vez menores rendimientos y el volumen de agua disponible para el riego escaseará.

Al mismo tiempo, la población mundial y por ende la demanda de recursos agrícolas y forestales para garantizar su subsistencia continuarán en aumento constante, lo que no sólo pondrá en jaque la sustentabilidad del medio ambiente, sino la existencia de numerosas especies animales y vegetales.

Ante tal escenario se requieren cambios de fondo en la organización y producción del campo, de modo que puedan adaptarse a esta nueva realidad emergente. Con el propósito de perfilar alternativas para lograrlo se realizó en marzo pasado en Montpellier, Francia, la Primera Conferencia Global sobre Investigación Agrícola para el Desarrollo (Global Conference on Agricultural Research for Development, GCARD).

La reunión convocó a políticos, científicos y diversas organizaciones sociales y empresariales, que participaron en foros y mesas de discusión que concluyeron con la emisión de una guía de trabajo. Ésta contiene las estrategias básicas para alcanzar metas como duplicar el abasto de alimentos hacia 2040 y liberar de la pobreza a los mil millones de habitantes que hoy la padecen en el mundo

El plan también enfatiza la necesidad de colaboración entre los diferentes actores involucrados, así como de la innovación constante a través de técnicas y procedimientos que permitan aumentar la producción agrícola: desde el mejoramiento convencional de cultivos por cruza selectiva o el enriquecimiento de suelos hasta la producción de transgénicos resistentes a plagas o sequías.

Cultivos en riesgo en AL

Con una población de 600 millones de personas (44% de ellas bajo la línea de pobreza) y 23% de los territorios cultivables del mundo, América Latina y el Caribe integran una de las zonas que requiere con urgencia no sólo adoptar nuevas políticas de desarrollo rural para enfrentar tales retos ambientales, sino la incorporación de más investigación científica y nuevas tecnologías.

Dicha necesidad queda de manifiesto en los informes de un grupo de especialistas del Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT, con sede en Colombia), quienes tras aplicar modelos de análisis para proyectar escenarios en el medio rural en los próximos años encontraron que la región de Centroamérica (que incluye la parte sur de México) será la más afectada del continente.

“Centroamérica es una región donde hay que poner mucho cuidado, pues se volverá más seca y caliente. Nuestros modelos matemáticos muestran que las áreas aptas para cultivar café arábica con calidad de exportación se verán sumamente afectadas”, advierte en entrevista el investigador Andy Jarvis, del CIAT y participante en la GCARD.

El líder del Programa de Análisis Político y Decisión del CIAT reconoce que en ciertas regiones los resultados de los modelos (alimentados con datos de temperaturas promedio, patrones de precipitación pluvial y proyecciones climatológicas) no ofrecen total certidumbre. Sin embargo, dice, en el caso del café “todos los modelos concuerdan en que habrá reducciones potenciales muy importantes en su producción”.

Precisa que hasta 80% del área cultivable con café en Centroamérica se verá afectada en alguna forma debido al impacto del cambio climático, razón por la cual los países afectados deben estar preparados y analizar alternativas cuanto antes, pues es muy demorado el proceso para mejorar la planta. Incluso sugiere que ante tal panorama podría estimularse el cultivo de otros productos más tolerantes al calor, como el cacao.

México aporta 3.42% de la producción total internacional de café, estimada en 122 millones de sacos de 45 kilogramos cada uno hasta 2006. Los principales estados productores son Chiapas, Oaxaca, Veracruz y Puebla (El Universal, 2 de mayo de 2010).

El agrónomo añadió que otros cultivos que se verán mermados en América central son el maíz y el frijol. Ante ello, en el CIAT desarrollaron una nueva variedad de la leguminosa resistente a sequías, a través de técnicas de hibridación. El producto se introdujo a Nicaragua y Panamá para su cultivo regular y se prevé que llegue también a México.

“Muchos procesos de investigación van a resultar en productos liberados en el campo hasta dentro de muchos años. Así que debemos estar desde hoy tomando las decisiones para el mundo de 2020 o 2030”, aseguró Jarvis.

Otros básicos bajo amenaza

Otro de los participantes en la GCARD, el agrónomo Rodomiro Ortiz, del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMyT, con sede en Texcoco, México) dice que los modelos matemáticos sobre afectación a la agricultura deben tomarse en cuenta, aunque enfatiza que son sólo predicciones, que pueden o no ocurrir.

“La adaptación al cambio climático implica la adecuación a muchos cambios extremos de temperatura, con sequías en ciertas zonas e inundaciones en otras. En el primer escenario el trigo, el frijol y maíz son los cultivos que podrían verse afectados en México”, argumentó el genetista y también director de Movilización de Recursos del CIMMyT.

Alertó que la afectación no sólo consistirá en una baja en el rendimiento de cosechas, sino también en la calidad de esos cultivos. También podrían enfrentarse -añadió- enfermedades y patógenos que ahora pueden estar bajo control, pero que debido a los cambios de clima se volverían peligrosos.

“Los centros de investigación y los bancos de germoplasma contienen parte de los recursos genéticos que se deben utilizar. Lo que se necesita es una evaluación sistemática de ellos para identificar las fuentes de mejoramiento”, aseguró.

Ante ello, sugirió promover un uso más racional de los recursos hídricos con la tecnificación de sistemas de riego y alentar prácticas agronómicas como la labranza mínima, que permite un mejor uso de suelos y el ahorro de energía. “Los gobiernos, junto con los congresos, tienen que tomar una decisión política para asignar recursos al desarrollo de materiales que puedan adaptarse al cambio climático”, dijo Ortiz.



comentarios
0