La relación del cofundador del gigante del internet, Sergey Brin, con la cara de la campaña de Google Glass, Amanda Rosenberg, no sólo resultó en el divorcio de Brin, sino también en el deterioro de su relación con su socio y también cofundador, Larry Page, afirma la revista Vanity Fair.

Page dejó de hablarle durante un tiempo a Brin, luego de que su romance con Amanda, 13 años más joven, se supiera públicamente.

"(La relación) fue inapropiada. Larry es tan estricto éticamente. Al parecer estaba muy molesto con la situación", asegura una fuente citada por la publicación estadunidense.

Hace un año, Brin y su esposa, Anne Wojcicki, que tienen dos niños pequeños, eran la pareja joven más destacada de Sillicon Valley, pero hace 10 meses iniciaron el proceso de divorcio.

Por su parte, Amanda inició el romance con Brin mientras aún salía con su novio en ese tiempo, un prometedor ejecutivo de Android, sistema operativo para móviles de Google.

De acuerdo con la revista, Wojcocki y Amanda se conocieron durante el proyecto de las Google Glass. Wojcicki incluso llegó a señalar a Amanda como "una amiga" y hasta le obsequió regalos de Navidad en 2012 y 2013.

Fue a principios de 2014 cuando la esposa de Brin descubrió los mensajes entre su entonces esposo y Amanda, a quien llegó a hablarle al respecto.

En abril, Brin se marchó de su casa, aunque Amanda tardó todavía un mes en dejar a su novio. Cinco meses después, Brin y Wojcicki anunciaron su divorcio.

Aún así, no todo ha sido felicidad desde entonces para la nueva pareja, Amanda ha confesado que actualmente atraviesa por una fuerte depresión clínica. "Aunque no estoy orgullosa de ello, tampoco me avergüenzo", señala.

Además, una persona cercana a ambos asegura que "los dos tienen peleas horribles, a gritos. Es parte de la pasión, la atracción química".




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