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Bebé esperanza, el drama mexicano que impacta a NY

NTX| El Universal
Miércoles 16 de octubre de 2013
El caso comenzó hace 22 años en las calles de 'La gran manzana', cuando hallaron el cadáver de una niña de 4 años en una hielera; hasta hace poco se pudo identificar que pertenecía a la hija de indocumentados mexicanos

El caso de la llamada "bebé Esperanza" , una niña de padres mexicanos cuyo cadáver fue encontrado hace 22 años en una vía rápida de la ciudad, reveló el drama por el que pasan millones de migrantes indocumentados en Estados Unidos.

El caso fue resuelto esta semana luego que las autoridades aprehendieran al supuesto asesino de la niña Anjélica Castillo, pese a que los padres, originarios de México, nunca reportaron la desaparición de la menor a la policía.

En entrevistas publicadas este martes en los sitios de internet de los diarios The Daily News y The New York Post, la madre de Anjélica, Margarita Castillo, afirmó que no reportó la desaparición de su hija por temor y por la inseguridad de no hablar inglés.

"Tenía miedo de que no pudieran entender porque no hablaba inglés. Eso me pasaba cuando llevaba a mis niñas a los hospitales" , aseguró Castillo en entrevistas concedidas en su departamento ubicado en el condado de Queens.

El supuesto asesino, que de acuerdo con la policía confesó que violó y mató a la menor, era su propio tío, Conrado Juárez, también inmigrante mexicano sin documentos, que laboraba como lavaplatos en un restaurante de Manhattan.

La madre de Anjélica recordó: "te sientes como una tonta cuando vas a las estación de la policía y pides un traductor. Me sentía intimidada. Es difícil de explicar. Me sentía ignorante acerca de los procedimientos" .

De acuerdo con The Daily News, Castillo, madre de nueve hijos, también temía al padre de Anjélica, por lo que prefirió evitar una denuncia.

Castillo indicó que confiaba en que Anjélica siguiera viva y que se encontrara con su tío, quien le pidió dinero para la manutención de la menor, aunque siempre puso excusas para que madre e hija pudieran verse.

Juárez le dijo después a Castillo que luego de uno de sus viajes a México la niña había desaparecido, y finalmente confesó que la menor estaba muerta, aunque siempre se negó a mostrarle la tumba a la madre.

Entre lágrimas, Castillo explicó que si viera a Juárez le diría: "¿por qué le hiciste algo tan horrible a una pequeña niña? ¿Por qué causar tanto dolor a una niña que no se podía defender?" .

cg

 



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