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El cáncer cuenta con un “aliado” que lo vuelve más letal y que le ayuda a quitarle la vida a 70 mil mexicanos cada año.

Se trata de un enemigo que hace que la enfermedad se torne más peligrosa y mortal, a pesar de que actualmente se cuenta con nuevas armas médicas para atacarlo y salvar más vidas.

Ese aliado lo componen los médicos de primer nivel, que emiten diagnósticos equivocados, que confunden la enfermedad a lo largo de meses e incluso años, y permiten que avance y sea irremediable.

Pero también los propios pacientes que, por ignorancia, falta de recursos, de una cultura de prevención o de descuido de su salud, acuden a tratarse cuando enfrentan niveles avanzados de la enfermedad.

En el Día Mundial contra el Cáncer 2012, Ángel Herrera Gómez, subdirector de Cirugía del Instituto Nacional de Cancerología (Incan), advierte que el problema real de esta enfermedad es que todavía 75% de los 125 mil casos nuevos de cáncer que hay en nuestro país, se diagnostican en fases avanzadas, cuando ya no es curable.

Ese —asegura— es el mal mayor del cáncer. Una enfermedad que si se detecta a tiempo tiene remedio y en la que hay nuevas armas como cirugías menos invasivas y medicamentos más dirigidos para atacar tumores y prolongar la esperanza de vida de las personas enfermas.

Abajo de la diabetes

El cáncer, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Salud (Ssa) y del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es la tercera causa de muerte entre los mexicanos, después de la diabetes mellitus y las enfermedades cardiovasculares.

En México, los problemas oncológicos más frecuentes entre las mujeres son cáncer de mama, de cuello cérvico uterino y del tubo digestivo o gástrico.

Mientras que en los hombres, es el cáncer de próstata, tubo digestivo, de colon y pulmonar.

Los tumores comunes a ambos géneros son el cáncer de pulmón y cáncer de colon recto. En tanto que en los niños es la leucemia.

En nuestro país, afirma Pedro Mario Escudero, director del Hospital de Oncología del Centro Médico Nacional Siglo XXI del IMSS, el número total de casos en la población por estos padecimientos tiende a aumentar en 45%.

Factores de riesgo para tener algún tipo de cáncer, de acuerdo con el especialista del Seguro Social, es la edad de la persona, la obesidad, el tabaquismo, la inactividad física y el consumo abundante de grasas en los alimentos.

Cada año, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se diagnostican 12 millones de personas con cáncer, de las cuales más de 7 millones fallecen.

De no adoptarse medidas, prevé el organismo mundial, para 2030 habrá 26 millones de nuevos casos, de los cuales 17 millones son personas que morirán.

Curable, cuando se detecta a tiempo

En un recorrido realizado por el Instituto Nacional de Cancerología, donde se pudo observar una sobredemanda en la atención médica, Ángel Herrera advierte que actualmente se ataca las consecuencias del cáncer, cuando las baterías se deben encaminar a prevenir más casos de esta enfermedad.

Recuerda que el cáncer es curable cuando se detecta a tiempo.

De seguir con el ritmo de crecimiento de nuevos casos, “no habrá recursos públicos que alcancen para la atención del cáncer que es costoso”, comenta el subdirector médico de Cirugía del Incan.

Considera que en los próximos años el cáncer gástrico o del tubo digestivo se puede convertir en la primera causa de muerte de los mexicanos debido a que está asociado a los malos hábitos alimenticios y la falta de ejercicio físico.

También, adelanta que en este año el Seguro Popular cubrirá el cáncer de próstata, y muy probablemente el cáncer de colon y el de ovario.

Al respecto, el director del Hospital de Oncología del Centro Médico Nacional Siglo XXI del IMSS, Pedro Mario Escudero, afirma que el cáncer es un verdadero problema de salud pública en México, ante el cual deberían destinarse más recursos para el diagnóstico oportuno y temprano, por medio de métodos de pesquisa, así como un mayor desarrollo del área de la investigación.

“A través de la investigación podríamos conocer de mejor el fenómeno del cáncer y promover medidas que van desde la prevención hasta el tratamiento”, precisa.

El especialista indica que una tercera parte de los pacientes que acuden al IMSS, pueden diagnosticarse antes de un crecimiento manifiesto del tumor, esto se conoce como detección oportuna.

Otra tercera parte de los pacientes puede tratarse y curarse, y una tercera parte más no sobrevivirán y no responderán al tratamiento a pesar de lo que se haga.

Estos últimos sólo recibirán cuidados paliativos, señala Pedro Mario Escudero.

Innovaciones en cirugías

A diferencia de lo que ocurría hace una década, hoy las cirugías contra los tumores son más conservadoras. En el pasado se pensaba que entre más se cortaba o se eliminaba el órgano, se tenían más opciones de curación. “Esto ha cambiado”, refiere Pedro Escudero.

“Si curo y preservo le doy a los pacientes una mejor calidad de vida y esto es uno de los grandes avances en el IMSS”. Por ejemplo —explica—, a un paciente con cáncer renal, no se le extrae todo el riñón como en el pasado, sino que puede conservarlo gracias a los nuevos tratamientos farmacológicos que hay.

Esto —asegura el directivo— permite la conservación de órganos vitales y una mayor perspectiva de vida para los pacientes. En el riñón no se pierde la capacidad renal, en la laringe se mantiene el habla y en el ovario y el útero permanece la función reproductiva.

Comenta que se han tenido casos de éxito en los cuales a las mujeres jóvenes con cáncer de ovario (a las que tradicionalmente se les quitaba el útero) ahora bajo ciertas circunstancias y en etapas tempranas de detección, pueden conservar el útero, y logran inclusive embarazarse.

En el caso de cirugías de laringe, los tratamientos agresivos, como la laringectomía o la traqueotomía, son hoy en día “perfectamente evitables” en la mayor parte de los pacientes que padecen cáncer.

Pedro Escudero asegura que en el IMSS se están tratando estos tumores mediante cirugía mínimamente invasiva, por vía oral y asistido con láser CO2, lo que permite realizar resecciones parciales del órgano, conservando las partes esenciales para realizar la fonación y la deglución “sin deterioro alguno o con un mínimo deterioro”.

Terapias más dirigidas

Sobre estos avances quirúrgicos y médicos, el subdirector de Cirugía del Incan, comenta que actualmente las cirugías para extirpar un tumor, localizado en alguna parte del cuerpo, son más fisiológicas y anatómicas destinadas a conservar su funcionalidad.

Por ejemplo, dice que cuando se detectaba cáncer de mama, la recomendación era una masectomía total; es decir, la extirpación de todo el seno. Hoy, destaca, hay masectomías parciales que buscan conservar o no extirpar completamente la mama, además de que hay reconstrucción de la misma.

En el caso de cáncer de recto, Ángel Herrera explica que con el uso de la quimioterapia y radioterapia se puede salvar a más pacientes la parte del ano.

Y lo mismo sucede, agrega, con el uso de las engrapadoras, en donde se puede hacer cortes muy bajos del recto y conservar el esfínter anal.

Antes, recuerda el subdirector del Incan, este esfínter se perdía y al paciente se le colocaba una bolsa externa, que iba conectada de la boca del tubo digestivo al abdomen para recolectar la materia fecal. Actualmente, aclara, todavía se presentan algunos casos, pero son menos cada día.

En el caso de cáncer de hueso, antes se amputaba la extremidad, y ahora hay prótesis metálicas que permiten conservar cualquier articulación, señala.

Además hay prótesis externas, destinadas para quien tuvo una afección cancerígena en el ojo, nariz, boca o mandídula, que son de las más raras, pero que han venido a revolucionar la calidad de vida del paciente.

En cuanto a radioterapias, estas también han cambiado y ahora son más selectivas para evitar dañar tejidos sanos.

“Hoy se radia exclusivamente el tumor y antes era todo el área cercana al mismo”, indica el especialista del Incan, quien tiene 23 años trabajando en este lugar.

Otra innovación son las tomografías en tiempo real, que dejan observar el tumor con más claridad y dónde se ubica exactamente.

En cuanto a las quimioterapias, el cirujano oncológo explica que son menos tóxicas que antes cuando provocaban vómitos, pérdida de cabello y daños en la médula ósea.

Sobre los medicamentos, existe actualmente una gama extensa de los mismos. En el pasado era un grupo de entre 20 y 30, ahora hay cientos para atacar el cáncer, dice el directivo médico del Institutode Cancerología.

Incluso hay terapias “blanco” que van dirigidas a atacar únicamente el tumor cancerígeno, aunque algunas de estas resultan muy costosas para la mayoría de los pacientes.

Voces de las organizaciones civiles

Mayra Galindo, presidenta de la Asociación Mexicana de Lucha contra el Cáncer, coincide en que el principal enemigo a vencer es la falta de interés de la gente por su salud, y los diagnósticos médicos incorrectos sobre esta enfermedad.

A este panorama, agrega Galindo, se suma la falta de más oncólogos en el país. Se estima, que hay alrededor de 800 especialistas.

La activista comenta que el lema de esta agrupación suscrito desde 1972 es: “Detectado a tiempo, el cáncer puede ser curable”, lamentablemente estas palabras continúan vigentes en México, debido a que la mayoría de los casos se detectan en etapas avanzadas de la enfermedad, cuando ya no hay cura.

En tanto, Alfonso Aguilar Mercado, presidente de Con Ganas de Vivir A.C, afirma que en México existen 90 mil niños huérfanos por padres que han fallecido por cáncer.

Considera que la mejor arma para revertir la mortalidad por cáncer es la prevención.

El cáncer —afirma— es un conjunto de más de 160 enfermedades distintas y varias de ellas pueden ser tratadas y se puede sobrevivir en muchos casos.