SAO PAULO (Agencias).— Aeronaves de Francia, Brasil y España buscaban ayer un avión de Air France que desapareció del radar cuando volaba sobre el océano Atlántico mientras se dirigía de Río de Janeiro a París, con 216 personas a bordo: un bebé, siete niños, 82 mujeres y 126 hombres, además de los 12 miembros de la tripulación.

El airbus 330 partió el domingo por la noche y unas cuatro horas después de despegar emitió una señal automática indicando que tenía problemas eléctricos.

El vuelo AF 447 desapareció sobre el océano Atlántico a unos 300 kilómetros al noreste de la ciudad costera de Natal, cerca del archipiélago de Fernando de Noronha, dijo un vocero de la Fuerza Aérea de Brasil.

Los equipos de rescate brasileños buscaban anoche rastros del avión; patrullaba la zona una aeronave Hércules equipada con un dispositivo de búsqueda electrónica para detectar la frecuencia del localizador de emergencia del airbus y un avión R-99 que utiliza un radar y un infrarrojo para captar objetos en el de Marzo y medir las diferencias de temperatura de los cuerpos. La Fuerza Aérea informó que ha movilizado un total de ocho aeronaves, que se suman a los tres navíos de la Marina, que rastrearán el área que corresponde al control aéreo brasileño, mientras que la zona bajo control aéreo de Dakar está siendo rastreada por aviones franceses.

Hasta ahora, la única pista sobre el posible lugar del accidente la aportó un piloto brasileño de la aerolínea TAM, que aseguró haber visto “extraños puntos naranjas” en aguas senegalesas.

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, dijo ayer en la mañana que las posibilidades de encontrar sobrevivientes eran “muy pocas”. “Ninguna hipótesis ha sido excluida” entre las causas probables de la desaparición, agregó el mandatario francés, quien se reunió en el aeropuerto Charles de Gaulle de París con familiares de quienes viajaban en el avión.

“Les dije la verdad. Las posibilidades de encontrar sobrevivientes son muy pocas”, dijo Sarkozy. Añadió que las tareas para hallar el avión “serán muy difíciles”, porque la zona de búsqueda “es inmensa”.

“No sabía qué decir”

Por su parte, el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, habló con su par francés. “Fue un intercambio de manifestaciones de pesar, ya que no sabemos precisamente qué pasó. Yo no sabía qué decirle a Sarkozy. En una hora como ésta, hay que expresar solidaridad y rogar a Dios”, dijo Lula.

En caso de que todas las personas a bordo hayan muerto, se trataría del desastre más letal de la aviación comercial desde el 12 de noviembre de 2001, cuando un avión de American Airlines se estrelló en el condado neoyorquino de Queens, en un vuelo a la República Dominicana. Hubo 265 muertos.

Air France informó que en el vuelo viajaban 58 brasileños, 61 franceses, 26 alemanes, nueve italianos, nueve chinos, seis suizos, cinco británicos, cinco libaneses, cuatro húngaros. La lista incluye también a dos estadounidenses, dos españoles, dos polacos y un argentino, entre otros.

El príncipe Pedro Luis de Orleans e Bragança, cuarto en la línea de sucesión de la corona brasileña, figura entre los pasajeros, informaron sus familiares. Es descendiente directo de Pedro II, que fue el segundo emperador de Brasil y gobernó hasta 1889, cuando se implantó el régimen republicano.

Francois Brousse, vocero de Air France, dijo que “es posible” que el avión haya sido alcanzado por rayos, pero expertos señalaron que es improbable que eso haya sucedido. .

Entretanto, Chris Yatesn, analista de al revista Jane’s Aviation, dijo que el avión se habría precipitado al mar a gran velocidad y que la caída podía atribuirse a varias causas: desde algo mecánico hasta un acto terrorista. En contraste, en Washington, un funcionario del Pentágono que pidió el anonimato dijo que no había indicios de que el incidente sea resultado de un acto de terrorismo.

En París, el director general de Air France-KLM, Pierre-Henri Gourgeon, indicó en una conferencia de prensa que el piloto tenía una experiencia de 11 mil horas de vuelo, incluidas mil 700 horas manejando ese tipo de aeronave. “En estos momentos, las reservas de combustible del avión no le permitirían continuar volando”, añadió. Si no se encuentran sobrevivientes, esta sería la peor pérdida de vidas humanas por un accidente de avión de Air France en sus 75 años de historia.

El secretario de Estado de Transporte francés Dominique Bussereau dijo en la capital gala: “No entendemos qué ha pasado. La hipótesis de un secuestro tampoco está descartada, pero el aparato tendría que haber aterrizado en algún lugar. Lamentablemente tenemos que contar con lo peor”.

Según el experto brasileño en accidentes aéreos Moacir Duarte, el hecho de que la aeronave esté desaparecida agrava el sufrimiento de los familiares de sus 228 ocupantes: “No hay certezas, no hay informaciones que dar. Lo único que sabemos es que los que se embarcaron en ese avión ya no están aquí”.

El gobernador de Río de Janeiro, Sergio Cabral, declaró luto oficial de tres días.