El Centro de Derechos Humanos "Miguel Agustín Pro Juárez" (Prodh) documentó que elementos de la Agencia Estatal de Seguridad y de la Policía Federal Preventiva incurrieron en uso excesivo de la fuerza durante el enfrentamiento con pobladores de San Salvador Atenco.

EL UNIVERSAL estuvo presente ayer en el juzgado donde los detenidos rendían su declaración preparatoria y pudo constatar que muchos presentan golpes y heridas graves.

Deogracia Morales Solís, habitante de Atenco, relata que a su casa entraron 40 granaderos que destruyeron muebles, puertas, aparatos electrónicos. Dos mujeres policía le robaron más de 10 mil pesos que tenía guardados en la alacena.

El centro Prodh recabó testimonios de integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) detenidos y golpeados, y realizó visitas en domicilios.

En el reporte se da cuenta de allanamientos y destrozos en viviendas, a las que ingresaron sin órdenes de cateo; lanzamiento de gases lacrimógenos en áreas donde se encontraban niños, ancianos y embarazadas, así como del sometimiento de detenidos con toletes, puñetazos y patadas.

Sobre la denuncia de violaciones sexuales, el centro Prodh cuenta de momento con testimonios indirectos. Testigos aseguran que las hubo.

En un comunicado desde Londres, Amnistía Internacional pidió hacer pública la identidad de los detenidos, garantizar su integridad física y acceso a asistencia legal y médica.

Senadores de PRI, PAN y PRD, integrantes de las comisiones de Justicia y de Derechos Humanos, calificaron como "lamentables y reprobables" los hechos de violencia y exigieron una investigación a fondo sobre los mandos que permitieron "la brutalidad" y se les sancione.

(Con información de Francisco Reséndiz)