claudia.bolanos@eluniversal.com.mx

La Procuraduría General de Justicia del DF (PGJDF) rastrea en el Estado de México, Morelos e Hidalgo el paradero de las dos camionetas en las que presuntamente fueron trasladadas las 12 personas que convivían en el antro “Heaven” de la Zona Rosa y que desaparecieron el domingo pasado por la mañana.

El titular de la dependencia, Rodolfo Ríos Garza, informó que en el cateo al antro no se hallaron rastros de violencia ni indicios de que se los llevó un comando armado.

En conferencia, mostró fotografías del interior: un lugar pequeño, con pocos sillones y una barra normal. Dijo que encontraron 12 pastillas psicotrópicas, 42 gramos de mariguana, 10 fragmentos dactilares, dos memorias de computadora y documentos contables y de consumo.

En la clausura de la reunión nacional de procuradores, el funcionario pidió la colaboración a sus homólogos, incluso de la Procuraduría General de la República (PGR), para buscar pistas de los vehículos en todo el país. Sin embargo, en el encuentro que el funcionario tuvo con los familiares de las personas desaparecidas, les informó que la búsqueda se centra en las tres entidades aledañas al Distrito Federal.

A la investigación también se sumó la indagatoria del caso de un joven que desapareció del mismo lugar en el año 2011, así como la ubicación de una casa donde se vio entrar a una de las camionetas señaladas y que podría ser cateada.

La Policía de Investigación también tiene órdenes de presentación del presunto dueño del lugar, identificado como Ernesto Lobo, quien ha sido buscado en distintos domicilios con los que está registrado de manera oficial.

Confirman camionetas

Como lo mostró ayer EL UNIVERSAL, el procurador Rodolfo Ríos habló de las imágenes de dos camionetas tipo Van a las que dieron seguimiento a través de las cámaras del C4, como posibles vehículos en los que trasladaron a los desaparecidos. Las camionetas negra y dorada que se observaron en las fotos difundidas por este medio siguen en rastreo a través de cámaras en el DF y sus salidas.

El área técnica de la Policía de Investigación continúa con la revisión de más videos, apoyados en un mapa descriptivo de la ruta que pudieron haber seguido los vehículos en el horario de la supuesta desaparición.

Sin violencia en el antro

El jueves por la noche, la PGJDF realizó un cateo al interior del bar “Heaven”, también conocido como “el Bicentenario”, “Hamsterdam” o “Mamá Grande”. Se aseguraron vasos utilizados por los clientes para determinar si las víctimas estuvieron en dicho antro, de acuerdo con el cruce de sus huellas dactilares.

Ríos Garza dijo que la dependencia no tenía evidencia de que las personas hayan ingresado al bar ni que hayan sido secuestrados por un grupo armado, como supuestamente lo dijo un joven, al parecer el único testigo que huyó por la azotea y que no ha sido ubicado, aún cuando se le buscó en el domicilio que dio al ir a CAPEA. Comentó que las dos videocámaras del exterior del sitio eran inhibidoras o de utilería y no sirven para grabar. Las del exterior no están conectadas a ninguna memoria, pero sospecha n que podrían transmitir vía internet.

Ríos Garza informó que en el cateo al antro no se hallaron rastros de violencia. Mostró fotografías del interior: un lugar pequeño, con pocos sillones y una barra normal. Dijo que encontraron 12 pastillas psicotrópicas, 42 gramos de mariguana, 10 fragmentos dactilares y dos memorias de computadora, además de documentación contable y de consumo.

El funcionario dijo que consideran que los chicos siguen vivos y no se han encintrado cadáveres que pudieran corresponder a las características de los chicos, como trascendió.