El historiador mexicano Miguel León-Portilla ponderó la figura de Francisco Xavier Clavigero (1731-1787) y habló de la importancia que tiene para la juventud mexicana conocerlo, ya que fue un hombre que, a pesar de haber vivido en el exilio y no contar con recursos económicos, trabajó para dar a conocer un capítulo importante en la historia de México.

Al inaugurar anoche el coloquio homenaje "Francisco Xavier Clavigero. En la memoria mexicana", en la Biblioteca Nacional de la UNAM, León-Portilla, principal autoridad en materia del pensamiento y literatura náhuatl, destacó la vida y obra de quien fuera un noble historiador que desvaneció los errores divulgados en el extranjero sobre la historia de este país.

En su intervención, el también antropólogo recordó a Clavigero como un personaje que influyó mucho en su juventud, aunque en su época fue muy criticado, sobre todo por un autor de nombre Filiberto Palimparra, ello porque en sus escritos "pareciera" que consultó las fuentes directas sobre la historia de México, cuando en realidad sólo hacia una reinterpretación de textos de autores españoles.

No obstante, para León-Portilla Clavigero fue un hombre que puso a la cultura indígena al nivel de la griega y la romana.

Entre las aportaciones del historiador y religioso novohispano, dijo, se encuentra sus obras: La Historia Antigua de México, La Historia de la Antigua o Baja California (en cuatro tomos); Diálogo entre Filaletes y Paeófilo, De las colonias de los tlaxcaltecas, Breve descripción de la Provincia de México en el año 1767 y un ensayo titulado Physica particularis, entre otras.

Tras su ponencia, se inauguró una exposición conformada por 36 documentos que pertenecen a la Biblioteca Nacional y que exhiben los cursos de Filosofía que los jesuitas impartieron durante la segunda mitad del siglo XVIII.

También se presentan documentos propios del Archivo Histórico de la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús.

En el primer caso, según el padre Arturo Reynoso, jefe del departamento de Filosofía y Humanidades del ITESO, Universidad Jesuita de Guadalajara, "este tipo de cursos, son como los que personas como Clavijero aprendieron en las aulas del Colegio Máximo de la Ciudad de México".

Se trata, aclaró el padre, de los apuntes de los estudiantes que aún conservamos en nuestra sede. En el segundo caso, destaca el manuscrito original de la Historia Antigua de México, de puño y letra de Clavigero. objetivo de la muestra, refirió, es contextualizar esta semana, es decir, la exhibición quiere representar el contexto histórico, desde el punto de vista de estos manuscritos de Clavigero: su formación, el ser jesuita y su obra.

El coloquio homenaje "Francisco Xavier Clavigero. En la memoria mexicana" continuará hasta el 28 de septiembre en el Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM.

sc