Los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y Francia, Nicolas Sarkozy, así como la canciller federal alemana Angela Merkel condenaron hoy al gobierno de Siria por el uso de la violencia contra civiles.

La Casa Blanca señaló que la condena fue hecha en el marco de llamadas telefónicas de Obama a sus homólogos, en las que también coincidieron en la posibilidad de aplicar medidas adicionales para presionar al régimen del presidente sirio Bashar Al-Assad.

Los líderes condenaron el uso indiscriminado de la violencia contra el pueblo sirio por parte del gobierno de Al-Assad y "saludaron la declaración del 3 de agosto del Consejo de Seguridad de la ONU condenando las acciones de Siria", indicó la fuente.

El martes pasado, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (ONU) condenó el uso de la violencia por parte del gobierno sirio contra su población civil, que ha causado la muerte de más de 150 personas en los últimos cinco días, según cifras de organismos independientes.

De acuerdo con esos organismos, en días recientes murieron 120 personas en la ciudad de Hama debido al uso de tanques, bombas y ametralladoras, en tanto que el resto perecieron en Deir Ez Zur y en enfrentamientos en los suburbios de la capital siria, Damasco.

Además de las ejecuciones de civiles que exigen reformas democráticas, el gobierno de Siria ha organizado una ofensiva que incluye detenciones arbitrarias en todo el país, así como arrestos de defensores de los derechos humanos, según la ONU.

Durante las conversaciones telefónicas, Obama, Sarkozy y Merkel abordaron también el tema de la crisis financiera en la Zona Euro.

tcm