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Familiares de las 21 personas detenidas en el penal de Barrientos, entre ellos 16 policías y agentes de tránsito municipal, interceptaron al dirigente estatal del PRI Luis Videgaray, para exigir un juicio transparente.

Con mantas y carteles que dicen "21 familias solicitan su ayuda", "Somos policías no delincuentes", "¡Libertad inmediata!", "Nuestro delito es ser servidores públicos", "Auto de libertad, porque no se cumplieron los requisitos para la formal prisión", los familiares obligaron al dirigente estatal del tricolor a detenerse en la entrada de la caseta de cobro de la autopista Chamapa-Lechería, esto al término de un acto de campaña del candidato del PRI Eruviel Ávila.

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