Un incendio registrado esta tarde en la Central de Abastos de Ecatepec, la más grande del estado de México y la segunda a nivel nacional, consumió entre 24 a 26 locales comerciales.

Protección Civil municipal reportó un bombero de Coacalco intoxicado por la inhalación de humo.

Para controlar las llamas que se extendieron en un área de 2 mil 800 metros cuadrados fue necesario que intervinieran vulcanos de Ecatepec, Coacalco, San Salvador Atenco, Nezahualcóyotl, Texcoco, Acolman, Tezoyuca, Tecámac, Tlalnepantla y Tonanitla.

Carlos Estévez, director de Protección Civil de Ecatepec, informó que la conflagración pudo ser causada por un corto circuito, o la caída de una veladora en uno de los negocios ubicado en la avenida Central y carretera Texcoco-Lechería.

Los trabajadores de los establecimientos explicaron que el siniestro inició cerca de las 16:00 horas.

Los bomberos de Ecatepec fueron los primeros en llegar al centro de abastos.

Elementos de la Policía Municipal y de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE) acordonaron la zona.

Empleados de las bodegas arrojaron botellas de agua para tratar de sofocar las llamas. El incendio comenzaría en un comercio de materias primas o en uno de frituras, ubicado en el pasillo C.

En poco tiempo se extendió a otros locales. Se escucharon varias explosiones, lo que aumentó la tensión de los propietarios, trabajadores y de los compradores.

El agua que llevaban las unidades del cuerpo de bomberos de Ecatepec no les alcanzó para controlar la conflagración, por lo que tuvieron que llegar vulcanos de otros nueve municipios metropolitanos.

Además, se sumaron a las tareas de sofocación conductores de pipas particulares que contribuyeron con el agua que transportaban.

Las labores de los bomberos se complicaron porque la mayoría del equipo de las corporaciones no está en óptimas condiciones.

Al filo de las 19:00 horas los bomberos de los 10 municipios que intervinieron en las labores lograron controlar el incendio.

Los peritajes que realice la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) determinarán las causas reales del siniestro. Los dueños de los comercios aún no saben las pérdidas económicas que registraron.