Dos de los cuatro estudiantes de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez que realizaban estudios de posgrado en instituciones de Japón, decidieron regresar a esta frontera para tranquilizar a sus familias y eliminar el estrés que genera la incertidumbre que existe en aquel país.

El rector de la UACJ, Javier Sánchez Carlos, estableció que la decisión de regresar se tomó luego de un análisis serio, aclaro, ¨contextualizando y valorando la opinión de sus familias y la decisión de regresarse a nuestra institución para poder buscar otra opción y continuar este intercambio académico¨.

Magdalena Aldape Castro y Emmanuel Vázquez Mayorga, estudiante del segundo semestre de la Maestría de Genómica, realizaban investigaciones con académicos de la Universidad de Nagaoka.

Sin embargo, en Japón permanecen otros dos estudiantes de la UACJ, Karla Lizette Tovar Carrillo y Manuel de Jesús Nandayapa, quienes cursan el último semestre del doctorado en Mecatrónica.

¨Dónde estábamos nosotros no hubo ningún tipo de desastre, la infraestructura es sorprendente, porque un terremoto de esa magnitud no causó daños a los edificios¨, expresó Magdalena.

Señaló que el día del sismo entabló contacto vía internet con sus familiares para tranquilizarlos, sin embargo a pesar de encontrarse en una de las zonas más seguras decidió regresarse.

¨Porque la situación es muy inestable, a pesar de que los reactores están lejos, si el núcleo llega a fusionarse, ni ellos mismos saben la magnitud que puedan tomar la explosiones y si es un poco arriesgado los niveles de radiación que puedan llegar aunque se dice que es poco, pero también la familia, por mi parte, influyó, ya que no estaba tranquila y es por ellos que yo estoy aquí¨, expresó.

La universitaria consideró que no hay punto de comparación entre lo que se vive aquí en la frontera y la situación del Japón, ¨los riesgos que se corren aquí son muy diferentes, no habría manera de relacionarlos¨.

Magdalena trabajaba en un proyecto de investigación con ¨proteínas de dicosilación, que se refiere a la inhibición de células cancerígenas¨, mientras que Emmanuel, ¨estaba viendo la localización de una proteína envuelta en el desarrollo del sistema nervioso central¨.

¨En si, ir a Japón es una experiencia totalmente enriquecedora, como lo he platicado con Emmanuel, casi imposible que pasara tanta cosa en un mismo lugar, lo que te pone a pensar en el futuro, por eso decidí regresar, era muy riesgoso y es una experiencia que no se recomienda, es mucho estrés no saber qué va a pasar, teniendo tantas plantas nucleares alrededor¨, agregó.

Emmanuel manifestó durante el sistema fue interesante ver como se movía el piso: ¨yo estaba haciendo un ensayo en el laboratorio, salí a hablar con el sensei, con el profesor, preguntándole ahora que sigue, nada, ellos seguían trabajando en la computadora, y yo me quede ahí en la computadora¨.

Manifestó que también decidió regresar para tranquilizar a su familia.

Indicó que la cultura es muy diferente, ¨ellos confían mucho en su gobierno, saben que si algo anda mal, les van a decir y los van a mover, claro que hay un poco de temor, porque nadie sabe el alcance, pero si están un poco asustados¨.

El rector de la UACJ reiteró que la decisión de regresar o no a Ciudad Juárez fue tomada por los estudiantes luego de consensuarla con sus familias.

Manifestó que una vez tomada la decisión, la UACJ decidió pagar el vuelo directo de Japón a Ciudad Juárez.

Asimismo, señaló que a partir de este martes se buscarán otras opciones para que Magdalena y Emmanuel continúen con sus estudios.

Indicó que continuarán en contacto con los otros dos estudiantes que se encuentran estudiando un doctorado en Mecatrónica, ¨por si la contingencia nuclear tiene otras directrices¨.

¨La UACJ continuará buscando ampliar el programa de movilidad estudiantil¨, agregó.

cg