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Umberto Eco regresa con El cementerio de Praga

El autor italiano vuelve a la ficción, muestra que todo es según convenga y acaba triunfando el rufián que desconfía de todos y siempre se mantiene alerta

Umberto Eco. El escritor italiano regresa a la ficción con El cementerio de Praga. (Foto: Archivo )

CIUDAD DE MÉXICO | Miércoles 15 de diciembre de 2010 NOTIMEX | El Universal08:27
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Después de unos 30 años de haber publicado su exitosa novela El nombre de la rosa, el filósofo italiano Umberto Eco (1932) vuelve a la ficción para mostrar que en la literatura y en la vida nada es lo que parece, y nadie es quien dice ser.

A través de su más reciente obra, El cementerio de Praga, el experto en semiótica sostiene que todo es según convenga y acaba triunfando el rufián que desconfía de todos y siempre se mantiene alerta, aunque no se mueva casi de esa mesa.

¿Cuál mesa? Donde fue visto al principio, cuando quizá nadie sabía, ni se imaginaba que Simonini y los hombres como él aún están aquí, entre todos los mortales del mundo, entre las personas y vinieron para quedarse.

La trama ocurre en marzo de 1897, en París. Desde las primeras páginas de la novela se observa a un hombre de 77 años, quien escribe sentado a una mesa, en una habitación abarrotada de muebles; es el capitán Simonini.

Un piamontés afincado en la capital francesa, quien desde joven se dedica al noble arte de crear documentos falsos. Hombre de pocas palabras, misógino y glotón impenitente, el capitán se inspira en los folletines de Dumas y Sue.

Los usa para dar fe de complots inexistentes, fomentar intrigas o difamar a las grandes figuras de la política europea. Caballero sin escrúpulos, Simonini trabaja al servicio del mejor postor. Esa es su forma de vida y modo de operar.

Con el correr de las páginas del libro, si antes fue el gobierno italiano quien pagó por sus imposturas, luego llegaron los encargos de Francia y Prusia, e incluso Hitler acaba aprovechándose de sus muy malvados oficios.

Umberto Eco, escritor italiano de renombre internacional y profesor en la Universidad de Bolonia, hizo su entrada triunfal en el mundo de la ficción hace casi 30 años con El nombre de la rosa, una novela que lo convirtió en un autor apreciado por la crítica y el público.

A este primer éxito siguieron El péndulo de Foucautl, La isla del día de antes, Baudolino y La misteriosa llama de la reina Loana. Tres décadas después de su primer éxito en el mundo de la narrativa, aparece El cementerio de Praga.

Todas sus novelas y sus ensayos, entre los que destacan Historia de la belleza, Historia de la fealdad, El vértigo de las listas y Nadie acabará con los libros, de reciente publicación, están recogidos en el catálogo de Editorial Lúmen.

ec



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