La diputada Verónica Martínez reconoció que Torreón es una ciudad afectada de agua con arsénico.

Es un problema, dijo, heredado del pasado que las autoridades hidráulicas no tomaron las medidas adecuadas para combatirlo en su oportunidad.

Advirtió que, desafortunadamente, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no tuvo la atención necesaria para evitar la sobre explotación de los mantos acuíferos, que es uno de los principales factores que genera la contaminación de arsénico en muchas norias que se utilizan para el consumo de agua de la población.

Consciente de la problemática, el gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, destinó 40 millones de pesos para la colocación de filtros para sanear el recurso que llega a los consumidores de esta localidad.

Como legisladora ha sostenido reuniones con los consejeros del Sistema Municipal de Agua y Saneamiento (Simas) para analizar diferentes alternativas de solución.

"Al parecer la más viable va a ser poner filtros en los pozos para poder bajar el nivel de arsénico".

La legisladora presentó hace algunos dos meses un punto de acuerdo ante el Congreso del estado para solicitar a las instancias municipales, estatales y federales relacionadas con el tema, que trabajen en conjunto para contrarrestar o erradicar, según el caso, este conflicto de salud.

Señaló que una semana después de haber presentado su propuesta, se llevó a cabo la reunión en la que se analizaron las alternativas más conducentes para proporcionar agua de mejor calidad. "Hay disponibilidad del Gobernador de apoyar las estrategias para finiquitar el problema", dijo.

Para Juan Carlos Parga Torres, alrededor del 30% de los pozos de la red de agua potable de Torreón está contaminado de arsénico al rebasar la Norma Oficial Mexicana (NOM) 127-SSA1 para consumo, que es de 0.025 miligramos por litro. (mg/l).

Por lo anterior el presidente del Comité Ciudadano por la Calidad y Cantidad del Agua de la Laguna de Durango y Coahuila buscará el apoyo de la sociedad y de un grupo de abogados para obligar al Sistema Municipal de Agua y Saneamiento (Simas) a que cumpla con las reglas de salud.

Indicó que datos conservadores revelan que el agua de 24 de los 78 pozos que existen en la ciudad está contaminada de arsénico en detrimento de la salud de los miles de torreonenses que la beben desde hace bastante tiempo.

Un sondeo realizado por el comité que preside, reveló que el líquido de algunas norias contiene valores de 0.037, 0.070, 0.041 y otros niveles por encima de la norma oficial, lo cual ya es calificado como un alto nivel de contaminación, indicó.

lae