Mediante un comunicado oficial el gobierno de Michoacán informó que en total fueron 13 los periodistas gráficos que resultaron retenidos el sábado pasado por comuneros de la población costeña de Pómaro, del municipio de Aquila.

A través del comunicado, la administración de Leonel Godoy también expuso que no se han recuperado los equipos de trabajo decomisados por los habitantes de la zona a camarógrafos y fotógrafos, y que versiones de los propios afectados calculan un valor de entre los 70 a los 100 mil pesos, entre cámaras de video y fotografía.

La oficina de Comunicación Social también confirmó que ocho trabajadores de una agencia publicitaria, que presuntamente realizaban comerciales para el grupo Modelo, fueron liberados el mismo sábado, tras ser también retenidos por la misma comunidad, a quienes también les fue incautado su equipo.

Los líderes de los comuneros se encuentran molestos porque no les fue pedido permiso para realizar filmaciones de la zona, atractiva por contar con playas semivirgenes.

El grupo de trabajadores de la lente realizaban desde el viernes una gira de trabajo a invitación de la secretaría de Turismo estatal, para promocionar atractivos turísticos de la costa michoacana.

Decidieron trasladarse al paraje del Pichilinguillo para captar aspectos de la vida cotidiana de la zona, cuando fueron confundidos con trabajadores de la empresa publicista. Tras acreditar su labor como reporteros, fueron liberados, sin su equipo.

A nombre de los líderes de los comuneros, uno de ellos quien pidió anonimato por cuestión de usos y costumbres, informó que este domingo llevaron a cabo una asamblea comunitaria donde acordaron que una de las condiciones para devolver el equipo es solicitar la presencia del secretario de Turismo estatal, Genovevo Figueroa.

Los pobladores se encuentran molestos al señalar que la dependencia ha quedado mal respecto a la defensa de sus terrenos contra el acecho de corporativos interesados en explotar las playas; así como en la dotación de apoyos.

Ayer regresaron a Morelia los 13 periodistas, sin presentar daño a su integridad física. El gobierno estatal se comprometió a continuar las negociaciones para la liberación del equipo. Condenó el hecho como "un atentado a la libertad de expresión".

cg