El presidente Felipe Calderón condenó esta noche el asesinato del menor Sergio Adrián Hernández, de 14 años, a manos de policías estadounidenses, y exigió se investigue a fondo lo sucedido y castigo a los responsables.

En territorio mexicano, exactamente abajo del llamado "Puente Negro" que divide la frontera, Sergio Adrián Hernández, de 14 años, fue baleado por agentes estadounidenses.

"Desde el momento en que el Ejecutivo Federal tuvo conocimiento de este reprobable hecho, instruyó a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) que solicitara al gobierno de Estados Unidos investigue a fondo lo sucedido y castigar a los responsables, además de que la propia Cancillería mexicana brinde toda la atención necesaria a los familiares del adolescente", especificó Presidencia.

En un comunicado emitido esta noche, la Presidencia informó que "Calderón Hinojosa refrendó la más enérgica condena del gobierno de México por la muerte de un adolescente, ocurrida en las proximidades del Puente Internacional Paso del Norte, Ciudad Juárez, cuando un oficial de la Patrulla Fronteriza disparó contra un grupo de migrantes".

Asimismo, expresó su más sentido pésame y solidaridad con los familiares de la víctima, de la cual no mencionó su nombre en el comunicado presidencial.

El gobierno de México utilizará todos los recursos a su alcance para proteger los derechos de los migrantes mexicanos.

"Reitera también su rechazo al uso de la fuerza desproporcionada por parte de autoridades migratorias de Estados Unidos en la frontera con México", precisó Presidencia en el boletín.

Conforme a los registros de la SRE, los casos de mexicanos muertos o heridos por el uso de la fuerza de las autoridades migratorias se han incrementado, al pasar de cinco en 2008, a 12 en 2009, y a 17 en lo que va del presente año.

Hace una semana, el mexicano Anastasio Hernández Rojas murió en un hospital estadounidense tras haber sido golpeado por agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.

fml