Raúl Plascencia, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), salió al paso de la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que limita las facultades de estos organismos de defensa de garantías, al establecer que no tienen atribuciones para impugnar leyes o normas nacionales que consideren que violan o vulneran derechos consagrados en tratados internacionales suscritos por México.

"Me parece que es una limitación, más bien para la sociedad en general a efecto de que puedan hacer valer los derechos que reconocen los tratados internacionales. Quizás hubiera sido más adecuado un punto de vista más amplio, menos restrictivo y sobre todo con una visión más internacional en materia de Derechos Humanos", dijo en entrevista en Los Pinos.

Luego de presentar su informe de actividades 2009, el ombudsman nacional pidió al Senado acelerar una reforma constitucional que tiene "atorada" en comisiones.

"Será muy importante que el Poder Legislativo pueda ahora sí meter el acelerador un poco más a fondo y aprobar esta reforma que está pendiente para evitar situaciones de esas características y sobre todo un mayor peligro a la sociedad mexicana para que tenga que enfrentar leyes que sean contrarias a los derechos humanos", explicó Plascencia.

La reforma pendiente en el Senado  protegería a los ciudadanos mexicanos con base en los tratados internacionales que son ley suprema y si hay una ley secundaria que es contraria o limita derechos se tiene que optar por los compromisos internacionales.

El atorón en el Congreso "creo que es un problema de negociación  política y esperemos que pueda resolverse y la puedan sacar adelante lo más pronto posible".