La huelga en el Colegio de Bachilleres continuará debido a la cerrazón de las autoridades de la Secretaría de Educación Pública (SEP) que no quieren ceder a modificar su planteamiento "tramposo" de recategorización, sostuvo el dirigente del Sindicato de Trabajadores de esa institución, Romualdo Escudero.

En entrevista, el dirigente de 6 mil trabajadores de base de los 20 planteles, subrayó que la propuesta de la SEP es impositiva, pues si bien establece recategorizar a más empleados de lo que ha demandado el sindicato, lo que hará es cambiar el nombre a las categorías, afectando en el futuro inmediato a los asalariados.

Puso como ejemplo que en el caso del personal auxiliar de servicios (intendencia), la SEP quiere designarlos como auxiliares administrativos y en un futuro inmediato, lo que sucederá es que las autoridades del colegio contraten servicio privado para la limpieza y paralelamente se hará a un lado a los trabajadores.

La recategorización que plantea la SEP, continuó, no sólo no la aceptan los trabajadores, sino que lo que proponen no está plasmado en el contrato colectivo de trabajo.

Romualdo escudero dijo que este asunto mantiene estancada las negociaciones, además de lo que se refiere a los 112 millones de pesos, sobre los cuales el dirigente señala que la SEP ya destinó la mayoría a otros rubros y sólo quedan 16 millones de pesos que las autoridades quieren entregar a través de un bono, el cual es rechazado por los sindicalizados.

Escudero insistió en que la huelga, que hoy cumple 33 días y que tiene sin clases a 120 mil alumnos, "durará lo que tenga que durar".

jfra