La Subsecretaría del Sistema Penitenciario local evaluará la sanción de carácter administrativo
que impondrá Miguel Ángel Guerrero Meza, interno del Reclusorio Oriente, por haberse escondido durante dos días y medios en un casillero.

Autoridades de la dependencia informaron que este miércoles se reunirá el Consejo Técnico Interdisciplinario para estudiar el caso y determinar el castigo que corresponda, ya que es la segunda ocasión que este reo incurre en una conducta similar.

La primera vez fue en 2006 en el Centro de Readaptación Social Varonil Santa Martha Acatitla cuando Guerrero Meza, quien cumplía una sentencia por robo, se escondió 48 horas dentro de una coladera sin que se esclarecieran sus motivos.

El pasado fin de semana el interno fue reportado desaparecido en el Reclusorio Oriente, donde cumple un proceso por extorsión, lo que originó una intensa búsqueda de dos días y medio cuando fue encontrado dentro de un casillero.

De acuerdo con autoridades penitenciarias esta conducta representa sendas violaciones al reglamento interno, ya que el reo no asistió al pase de lista y tampoco se encontraba en su celda, por lo que amerita una sanción.

En cuanto a su estado de salud, la Subsecretaría del Sistema Penitenciario del Gobierno del Distrito Federal indicó que el interno se encuentra bien y sólo presentaba debilitamiento por sed y hambre.

No obstante, se analiza también el estado de aparente depresión que atraviesa Guerrero Meza tras haber sido encarcelado nuevamente en septiembre pasado y si esa situación habría motivado que se escondiera.

La Subsecretaría reiteró que en este caso no hay delito qué perseguir contra el personal de custodia, razón por la cual se han levantado los cargos contra el técnico en seguridad penitenciaria, Roberto Montoya Morales.

No obstante, la dependencia reconoció que la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal mantiene una averiguación previa abierta por este caso, y será ella la que deslindará las
responsabilidades correspondientes.

cgb