Fuerzas combinadas del Ejército, de la Policía estatal y Ministerial arrestaron a cuatro sicarios, presuntamente implicados en el ataque con granadas a una oficina de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) en esta capital, ejecutado el pasado miércoles.

En el operativo fue incautada una casa de seguridad con un arsenal de armas largas, pistolas, miles de cartuchos de diversos calibres y el automóvil que se utilizó para cometer el atentado.

Fueron aprehendidos Héctor Rodríguez Castillo, alias El Comandante Conejo; Mario Martín Pérez Ramírez, El Memín; Juan Clemente Rodríguez González, El  Gallo y Saúl Librado Ramírez Cerrillo, El Chicle.

La Procuraduría General de Justicia del Estado informó que los detenidos confesaron su participación en el atentado  a la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Ambientales, "en venganza  por las acciones emprendidas contra la delincuencia organizada".

En la casa de seguridad  se decomisaron diez fusiles R-15, dos fusiles AK-47 y un fusil Galil, además de 10 pistolas 9 mm, 65 cargadores, así como tres mil cartuchos de  diversos calibres  y una camioneta, sin placas de circulación, con la cual se consumó el atentado.

El pasado miércoles, un comando atacó con granadas de fragmentación las oficinas de la Fiscalía Ambiental en el fraccionamiento residencial Los Laureles. La incursión violenta dejó cuatro personas heridas.

La PGJE atribuyó el atentado a " tala montes" en represalia por las acciones gubernamentales de "cero tolerancia contra la tala clandestina"

El ataque se  produjo a 24 horas después de que ejecutores ligados a Los Zetas atacaron a la Policía Ministerial y Fronteriza del municipio de Frontera Comalapa, y luego del traslado a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada, Albertino Rodríguez El Comandante Morro o El Tino.

El Comandante Morro operaba como uno de los líderes de Los Zetas en Chiapas, donde comercializaba automóviles robados en otras partes del país.

mma