En la octava entrega del Premio Nacional de Periodismo fue unánime el repudio a la muerte de los periodistas por informar con la verdad.

José Morales Orozco, presidente del Consejo Directivo del Consejo Ciudadano del Premio Nacional de Periodismo, exigió que cesen los ataques a los periodistas y se castique a los culpables.

El también rector de la Universidad Iberoamericana dijo que "basta ya de impunidad".

En el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, señaló que el escándalo abona a favor de la vida democrática de un país, pero se puede llegar a trivializar y sembrar el desinterés en la sociedad.

En el discurso de apertura de la ceremonia, exhortó a levantar la voz contra quienes quieren acallar a los periodistas, pero también dijo que hay que hacer una autocrítica de la actividad periodística.

Katia D'Artigues y Leon Krauze, los periodistas conductores de la ceremonia, manifestaron su rechazo por la muerte del periodista Eliseo Barrón, ocurrida en Durango.

Se presentó el Informe Buendía 2008, en el que comunicadores dan cuenta de las agresiones que han sufrido los periodistas, el estado de la libertad de expresión y de la prensa en México.

Jorge Fernández Melendez dijo que en 2007 se registraron cinco asesinatos contra periodistas y en 2008 se elevó a 12.

Refirió que en la mayoría de los casos fue por ejercer el periodismo en zonas donde la delincuencia tiene mayor presencia y control.

Dijo que es preocupante que en este año electoral se agudicen las agresiones contra el gremio ya que en el primer cuatrimestre se contabilizan más de 100 actos de intimidación contra periodistas de los cuales cinco han sido homicidios.

Adela Micha se refirió a las amenazas que reciben los periodistas de parte de las autoridades de Seguridad Pública, que provocan no sólo la censura, sino la autocensura, y en algunos casos el autoexilio.

Aseveró que es reprobable la autocensura y los asesinatos, ya que el fin es silenciar el trabajo de los medios de comunicación, pero se daña el derecho a los ciudadanos de estar informados.

De las nuevas formas de censura se refirió la periodista Carmen Aristegui, quien dijo que este tipo de acciones son formas indirectas no violentas para coartar la libertad de expresión.

Señaló que en 2008 se registraron 13 denuncias contra periodistas, seis por empresarios y particulares y siete por funcionarios públicos contra reporteros que hacen investigación y que denuncian actos de corrupción o ilegalidad.

La politóloga Denise Dresser, presidenta del jurado, exhaltó la labor periodística, ya que es un gremio que se enfrenta contra "el diablo".

Lamentó que México se encuentre entre los 15 países más peligrosos para ejercer el periodismo como Irak, Colombia y Sierra Leona, entre otros.

Recibieron el premio en la categoría de caricatura Ángel Boligán por su cartón titulado "Wall Streetanic", publicado en EL UNIVERSAL.

En la categoría de orientación y servicio a la sociedad, Miguel Ángel Chávez Díaz, de León, por "El dulce encanto de mi embolia", difundido por la revista Día Siete.

También premiaron a Marco Lara Khlar, en la categoría de transparencia y acceso a la información por el reportaje "Vida de lujo y salarios sin límite del TEPJF", publicado en la revista Transparencia y Corrupción.

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