La perspectiva de la calidad crediticia de México se pondrá a prueba por la recesión, problemas estructurales y las elecciones de julio, informó Moody´s.

"Aunque la calificación de Baa1 de México es estable, las indicaciones de una severa y prolongada recesión, además de problemas estructurales subyacentes pondrá a prueba la perspectiva de crédito del país", expuso la calificadora.

Agregó que las implicaciones políticas son un factor importante, una vez que a mediados de julio se realizarán elecciones que pueden cambiar el equilibrio de poder en el Congreso con tres años restantes en la administración del Presidente Calderón.

Aunque, detalló la calificadora, "seguimos viendo un fuerte apoyo al crédito de los indicadores de deuda pública manejable, fuerte compromiso con la responsabilidad fiscal, y continuó el acceso a los mercados.

En la presentación del documento "Calificaciones soberanas de América Latina siguen siendo resistentes, pero todavía hay preocupación", Moody´s expuso que México puede ser el país más vulnerable a la totalidad de choques por la que la crisis.