Nueva Zelanda confirmó el miércoles más nuevos casos de influenza porcina y en Australia se endurecieron las normas de modo que las autoridades podrán detener a personas bajo la sospecha de estar infectadas en momentos en que los países asiáticos, aunque todavía libres de la enfermedad, se preparaban para el peor escenario pero aguardaban esperanzas de que la epidemia no avance.

El número por casos de infectados por gripe porcina en Nueva Zelanda aumentó a 14, informaron funcionarios de salud e incluso incluyeron a una persona que no estuvo dentro del grupo de estudiantes y maestros que regresaron recientemente de México, el epicentro de la epidemia que se extiende a todo el mundo.

Estos fueron primeros casos confirmados en la región Asia-Pacífico.

El ministro de Salud Tony Ryall indico que las pruebas de laboratorio de la Organización Mundial de la Salud en Australia confirmaron tres casos de infección por gripe porcina entre integrantes del grupo escolar que mostraron síntomas de sufrir influenza, y otro viajero que también regresó recientemente de Norteamérica y que posiblemente podría estar también infectado.

La funcionaria regional de salud, la doctora Julia Peters, indicó el miércoles que la cifra había aumentado a 14 casos durante la noche porque otros dos estudnantes del grupo y otro viajero que volvió recientemente de Norteamérica al parecer también están infectados.

"Podemos considerar que se trata de gripe porcina los 14 casos identificados", indicó Peters, quien comentó que los 14 casos han respondido favorablemente al tratamiento con fármacos antivirales y mediante la cuarentena voluntaria en sus hogares.

Nueva Zelanda tiene otros 44 casos posibles aunque se están revisando en los laboratorios.

Las autoridades de salud indicaron que la cepa de gripe porcina que afecta a los estudiantes de Nueva Zelanda es la misma que ha matado a 150 personas y enfermado a más de dos mil 400 en México.

Unos cien casos ya fueron confirmados en todo el mundo y la cifra sigue avanzando aunque lentamente.

mvc