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"Se escuchó un estruendo, un golpe hueco"

Testigos del accidente del Tren Suburbano relatan que muchas personas se asomaron por las ventanas y gritaban, buscando salir de los vagones, pero se los impidió la malla de protección
Tlalnepantla | Domingo 19 de abril de 2009 Juan Manuel Barrera/ corresponsal | El Universal10:29
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Primero fue el estruendo y luego sintieron el golpe. Todos los pasajeros salieron disparados de sus lugares. Sabían que el tren había chocado, pero desconocían la magnitud del accidente y la desesperación los invadió. Hubo gritos, llanto, dolor y miedo.

"Se escuchó un estruendo, un golpe hueco, nada más", relata uno de los testigos. Agrega que muchas personas se asomaron por las ventanas y gritaban, buscando salir de los vagones. Pero no pudieron, la malla de protección del propio Tren Suburbano se los impidió.

El percancese registró al filo de las 22:00 horas. Las autoridades afirman que a las 22:15 horas, pero habitantes de San Pedro Barrientos aseguran que fue a las 22:00 horas en punto.

Pasajeros señalan que el tren en el que iban se detuvo, apenas recién había salido de la estación San Rafael, a unos 300 metros de la misma. En ese lugar estuvieron alrededor de 15 minutos, hasta que fueron alcanzados por el tren que venía detrás. Después todo fue confusión.

Calculan que de la estación Buenavista hasta el punto del accidente hicieron más de una hora de tiempo, cuando el recorrido en condiciones normales se realiza en 25 minutos, de Buenavista a Cuautitlán.

"El tren se venía parando y en varios puntos se quedó hasta 20 minutos. Ya estábamos desesperados. Algunos hasta golpeaban en el interior", menciona otro testigo.

Patricia Velázquez Pérez, habitante de la calle Camino Nacional Sur, colonia San Pedro Barrientos, en Tlalnepantla, asevera que los pobladores intentaron apoyar a los pasajeros del tren, que estaban atrapados y no podían salir de la malla que confina este medio de transporte.

"Primero empezamos a ir los hombres y mujeres, niños no, queriendo sacarlos, pero no se pudo por la malla, la cerca, y empezó a llegar el Ejército, ambulancias. Los sacaron. Lo único que nosotros pudimos hacer por las personas que empezaron a salir, salieron todas desubicadas, empezamos a decirles que para dónde iban y las acompañamos a sus camiones, a sus casas", indica.

Añade que la mayoría de los pasajeros salieron por su propio pie, caminando, aunque algo tambaleantes. Algunos se repusieron un poco de la sorpresa y el susto, para después continuar su camino.

Las autoridades del Estado de México reportaron el traslado de solamente 36 personas a hospitales del Distrito Federal y municipios mexiquenses. Sin embargo, a la Cruz Roja de Cuautitlán-México llevaron a varios heridos para brindarles atención, también varias ambulancias llegaron al hospital del IMSS de La Quebrada, en Cuautitlán Izcalli, con pasajeros lesionados.

En un balance realizado en el sitio del accidente por el primer superintendente Raúl Esquivel, director de bomberos del Distrito Federal, estima que parte de los 600 pasajeros que viajaban en los dos trenes sufrieron "golpes contusos en diferentes partes del cuerpo, algunos de gravedad, pero todos ellos -según los paramédicos y médicos- no pierden la vida. Había gente histérica, muy nerviosa, pensaban que había muchos muertos".

Rescatistas del ERUM coinciden: "algunos iban graves, había fracturados, con contusiones múltiples en la mayor parte de su cuerpo, algunos se retiraron por su propio pie, los menos heridos. Los más graves los trasladaron las ambulancias".

El Tren Suburbano inició operaciones en junio del 2008 y en menos de un año ha sufrido varios percances, como la suspensión del servicio en dos ocasiones por fallas y el pasado 8 de marzo dos trabajadores que realizaban labores en las vías fueron atropellados por el férreo.

Autoridades mexiquenses precisaron que en el Tren Suburbano viajan diariamente más de 90 mil personas. Parte importante de los pasajeros abordan la estación Cuautitlán y provienen de municipios como Tultepec, Melchor Ocampo, Zumpango, Teoloyucan, Coyotepec y Cuautitlán-México. En la estación Lechería suben también muchas personas, sobre todo habitantes de Cuautitlán Izcalli. Las estaciones Tultitlán, San Rafael, Tlalnepantla y Fortuna registran poca afluencia. La gran mayoría de usuarios llega hasta Buenavista, en el Distrito Federal.

mma



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