A las 12:17 horas entró el gobernador Ulises Ruiz Ortiz al ex convento de Santo Domingo, lugar que hasta ayer había ocupado la Asamblea Popular de los pueblos de Oaxaca (APPO).

Luego de seis meses de conflicto con la APPO, el mandatario ingresó a pie a esta zona del centro histórico que fue emblemática para el movimiento que ha confrontado a su gobierno.

Frente al templo de Santo Domingo se toma la foto acompañado de los presidentes de la gran comisión de la cámara de Diputados, Bulmaro Rito Salinas, y del Tribunal Superior de Justicia, Héctor Anuar Mafut, además de decenas de simpatizantes y funcionarios.

Dos helicópteros de la Policía Estatal y de la PFP sobrevuelan la zona.

Recorre Ulises Ruiz zona de enfrentamientos

El gobernador oaxaqueño realizó un recorrido por algunos de inmuebles que fueron incendiados anoche tras los enfrentamientos entre miembros de la APPO y la Policía Federal Preventiva.

Acompañado del presidente de la gran Comisión de la Cámara de Diputados local, Bulmaro Rito Salinas, y del presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Héctor Anuar Mafut, el mandatario oaxaqueño recorrió a pie algunas de las calleas del centro histórico.

A su alrededor se desplegó un operativo policiaco para garantizar su seguridad y convoyes de camionetas pic-up con decenas de policías preventivos estatales “peinan la zona”.

El gobernador Ruiz Ortiz inició su recorrido a las 11:25 horas en el parque El Llano al nororiente del zócalo. Se dirigió primero al teatro Juárez que fue destrozado en su fachada y accesos de puertas cristal; recorrió los escombros en la secretaría de turismo que fue incendiada.

Minutos más tarde se dirigió a la sede de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles de Oaxaca en las esquinas de las calles de Berriozabal y Reforma y que también fue incendiada.

Poco antes del medio día ingresó al edificio del Tribunal Superior de Justicia del Estado en la esquina de Melchor Ocampo e Independencia en donde revisó como fueron destruidas en su totalidad las oficinas que ocuparon cuatro salas del Poder Judicial Oaxaqueño y donde se perdieron unos 6 mil expedientes.

grg