La diputada del PRI, Martha Hilda González, rechazó que el partido sea rehén de nadie en el Congreso, en la naciente LX Legislatura.

Detalló que el partido fijará su agenda y luchará por dar las mejores respuestas a la nación, como medio para recuperar la confianza de la sociedad, al presentar el posicionamiento de su partido, previo a la presentación del sexto informe de gobierno del presidente Vicente Fox.

Al iniciar su participación en la máxima tribuna del país, la legisladora dijo respetar la seguridad dada a legisladores, pero rechazó el estado de sitio con el que la fuerza pública mantiene el Palacio Legislativo de San Lázaro.

Llamó a sumar en favor de un desarrollo de México con justicia social.

Pidió atención inmediata al conflicto en Oaxaca y pidió la actuación decidida del gobierno federal ?el gobierno no puede ser omiso ante el conflicto de una entidad que forma parte de la federación?, dijo.

Reconoció que la alternancia y la transición actuales hubieran sido impensables sin el andamiaje político promovido por los priista y el acatamiento respetuoso a la voluntad popular. ?Seamos demócratas en la victoria y en la derrota, consciente de que ni los triunfos ni los reveses electorales son permanentes?, dijo.

La sociedad optó por la alternancia en un ejercicio de libertades y estabilidad social. Fox debería avergonzarse por no haber cumplido a los mexicano.

La falta de oficio político provoca que confrontaciones sean frecuentes, señaló.

Sufrimos de ingobernabilidad por falta de pericia que reduce la problemática nacional a las encuestas y los índices de popularidad.

Hoy observamos un severo estancamiento en crecimiento económico y generación de empleo, que por su dimensión no pueden esconderse. En el campo hay hambre y desesperación, la política del estado social ha sido cambiada por la política empresarial.

?Hoy, hoy hoy? avergüenza vivir en un país pobre, con falta de oportunidades que provoca el aumento de migración. El país pierde lugares en múltiples indicadores mundiales como de competitividad, economía, educativo, inversión en ciencia y tecnología.

Al comparar las expectativas del gobierno de Fox, hace seis años, dijo, se abre la brecha con el resultado que presenta en su último tramo.

Repudiamos a quienes llaman a la rebelión y amenazan la paz de todos los mexicano y nos mostramos en favor de un papel más activo de interlocución del gobierno federal para dar respuesta a problemas de Oaxaca.

Denunció una flagrante violación al código electoral de Chiapas, condenó las irregularidades durante y después de la jornada electoral. ?Nada debe estar más allá de las instituciones que la democracia misma ha construido, rechazamos la violencia y la intransigencia como recursos falaces del cambio social?.

El PRI refrendará su compromiso político y social asumiendo la responsabilidad de transformar a México. Adelantó que su partido rechazará reformas de conculcación de derechos sociales; fortalecerán principios con educación, salud igual entre hombres y mujeres, el desarrollo sustentable, el derecho a trabajo, la atención digna a los grupos vulnerables y al campo,

Seremos protagonistas corresponsables de la gobernabilidad que el país exige. Rescataremos la política exterior mexicana, degenerada en activismo torpe en la presente administración.

Reconoció que en los acuerdos entre las fuerzas políticas anida la solución para ofrecer resultados positivos y que se necesitan consensos dentro del marco ley.

Colaboraremos para que la gente perciba que vale la pena la democracia.

Con ese ánimo construiremos acuerdos y realizaremos alianzas.

Reconoció el alto sentido nacionalista de las fuerzas armadas, ?pueblo en uniforme?, mejor garante de la soberanía de los mexicanos. El cumplimiento cabal de las responsabilidades públicas transita por la gobernabilidad.

Quizás el estandarte más sincero que podemos ofrecer los prisitas tenga que ver con la paz, concluyó.

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